Expertos en Seguridad Vial y en Derecho coincidieron en que antes de modificar los protocolos de actuación para aplicar pruebas de alcoholemia, se debe trabajar en la capacitación de los elementos que asumen el papel de primer respondiente.Luis Martínez , experto en Proceso Penal, acentuó que, en el primer caso, se arrastran deficiencias desde el inicio del nuevo sistema penal adversarial que provocan omisiones en la aplicación de protocolos y la correcta recopilación de elementos de prueba.Con respecto a los dictámenes de peritaje, dijo que no se deben perder de vista las fallas que arrastra el Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses (IJCF), que requiere mayor personal, capacitación y recursos.Alma Chávez, quien encabeza la agrupación Víctimas de la Violencia Vial, señaló que en el caso del accidente registrado el pasado 23 de junio en Zapopan, donde murió una pareja de recién casados, se evidenció la falta de preparación del personal que fungió como primer respondiente.Refirió que el principal error fue no aplicar las pruebas de alcoholemia en el sitio con el argumento de que se privilegió atender la salud de Joao “N”.“Lo que se puede hacer, que es válido, es un examen de retrospectiva de alcoholimetría. Si una persona, cinco horas después de tener un siniestro, sale con 50 miligramos de alcohol por cada 100 mililitros de sangre, te vas a las horas anteriores y con elementos científicos se puede determinar el grado de alcohol que tenía al momento del accidente”.El alcalde de Zapopan, Pablo Lemus, indicó que las cámaras no captaron modificaciones en la escena del choque en el que estuvo involucrado Joao “N”.Comentó esto luego de que testigos afirmaron que fueron eliminadas botellas de alcohol del auto del futbolista y se retiraron palmas del lugar.Resaltó que todos los videos se entregaron a la Fiscalía. “Nosotros estamos poniendo todos los elementos que tenemos a nuestra disposición porque queremos que este jugador pague un castigo ejemplar”.Protocolo vigente El protocolo vigente para la aplicación de pruebas de alcoholemia está vigente desde noviembre de 2013. Fue modificado en 2014 sólo para añadir la figura de unidad itinerante.Para que todos los casos de accidentes viales en los que haya fallecidos se consideren delito de culpa grave si el causante maneja alcoholizado, el diputado Jonadab Martínez anticipó que presentará una iniciativa para modificar el Artículo 63 del Código Penal estatal.Con este ajuste, el legislador busca que en los incidentes de este tipo se aplique el agravante de culpa grave, que implica sanción de tres a 10 años de cárcel. Actualmente el castigo va de tres días a ocho años de prisión.Martínez lamentó el caso de la pareja de recién casados que falleció en el accidente vial registrado el pasado 23 de junio en Zapopan, pero descartó que legisle por coyuntura.Sobre la revisión a los protocolos, apuntó que se podría optar por la aplicación de nuevas tecnologías para hacer las pruebas.LA VOZ DEL EXPERTOLuis Martínez Espinoza (académico de la UdeG)El especialista en Proceso Penal consideró que en el caso de Joao “N” y el accidente vial en el que murió una pareja de recién casados, el Ministerio Público aún puede aportar los elementos de prueba suficientes para que el juez de control reconsidere las agravantes de exceso de velocidad y el examen de alcoholemia.Comentó que en la etapa actual del proceso todas las partes involucradas pueden aportar elementos para aumentar la pena o para frenarla“El Ministerio Público debe indagar bien la actuación de los primeros respondientes y, si hubo negligencia o dolo en su actuación, (debe) proceder en consecuencia en términos de la ley”.
