Tal y como lo predecían los reportes del clima, la cuarta y última ronda del AT&T Pebble Beach Pro-Am se vio severamente afectada y su conclusión quedó en suspenso.Desde muy temprano, el día pintaba para ser frío, con viento y con altas posibilidades de lluvia, pero ciertamente nadie estaba esperando lo que se vivió horas más tarde en la costa del condado de Monterey, en California.A mitad de la ronda el juego tuvo que ser suspendido por la fuerte granizada que caía además de la lluvia, los fairways se cubrieron por grandes charcos de agua y los ''greens'' por una densa capa de hielo. Una vez pasada la tormenta, los trabajadores e intendentes lograron recuperar el campo para que los jugadores volvieran a sus respectivos hoyos e intentaran vencer la luz para terminar la jornada, sin embargo esto no fue posible.La ronda tuvo que ser suspendida por falta de luz, dejando a los últimos tres grupos sin poder finalizar el recorrido, obligándolos a regresar a primera hora hoy para conocer quién será el nuevo campeón en Pebble Beach.Al inicio de la ronda, el inglés Paul Casey gozaba de una cómoda ventaja de tres golpes sobre Phil Mickelson, sin embargo, el estadounidense demostró por qué lleva mucho tiempo siendo considerado uno de los mejores golfistas del mundo. Mickelson no sólo alcanzo a Casey, sino que remontó la desventaja para tomar el liderato antes de la suspensión del juego. Con dos hoyos por jugar, Mickelson tiene tres golpes de ventaja sobre su compatriota Scott Stallings, quien alcanzó a terminar la ronda y Paul Casey, quien no logró concluir el hoyo 16 a diferencia de Mickelson.El único mexicano en el fin de semana, Roberto Díaz, tuvo una sólida ronda final de dos abajo de par, 70 golpes, para hilar así su cuarta ronda en números rojos para el torneo. Con este resultado, el veracruzano se ubica momentáneamente empatado en el lugar 18, para ser éste el mejor resultado de ''Bobby'' en la temporada.
