En un estado tan diverso como Jalisco, no hay rincón que Laura Haro no haya pisado. La dirigente priista se ha convertido en la única política que ha recorrido el territorio estatal en seis ocasiones completas, una hazaña que -asegura- no es un récord personal, sino un compromiso con los jaliscienses.Recién llegada de un recorrido por Amatitán, Tequila, Hostotipaquillo y Magdalena, Haro habla con entusiasmo. “Cada municipio, cada comunidad, tiene su propio latido. Y solo puedes entenderlo si estás ahí, escuchando a la gente, no desde una oficina”, afirma.Para ella, el PRI vive un momento de dinamismo renovado. “Nos dicen que el PRI no se detiene, y tienen razón: estamos en las calles, en los mercados, en las plazas. Lo que hacemos no es de escritorio, es de territorio; no sólo es la gira, son cada una de las activaciones del partido. Esa es nuestra esencia y por eso la gente nos abre la puerta de sus casas y nos vuelve a dar su confianza”.A lo largo de seis giras estatales, Laura Haro ha visitado zonas urbanas y rurales, desde los centros industriales hasta las comunidades más alejadas de la Zona Norte. “He visto lo que duele y también lo que da esperanza. Me he encontrado con jóvenes que quieren oportunidades, con mujeres que sacan adelante a sus familias, con agricultores que cuidan la tierra. La política que no escucha se vuelve sorda y ciega. Por eso no me canso de salir”, comentó.Su ritmo, admite, es agotador para algunos. Para ella, es apenas el inicio. “La cercanía no se improvisa. No se trata de aparecer solo en campaña. Si la gente me reconoce en la calle, es porque me ha visto trabajar, porque sabe que he regresado una y otra vez. Y así seguiré, porque nos importa Jalisco y su gente”.Con una mirada retadora, Laura Haro concluye: “Jalisco no se recorre sólo con los pies, se recorre con el corazón, y muy pocos están dispuestos a ello”.