Marco Antonio Guevara Segura es un brigadista que desde los 14 años comenzó como voluntario en el combate a los incendios forestales y ya tiene 13 años de trabajar para Zapopan. Pero aunque la experiencia es mucha, Servicios Médicos lo mandó a descansar por presentar un cuadro de fatiga."Ahorita ya me tomaron signos vitales, nos rehidratamos y ahorita nos acaban de decir que ya estamos francos para irnos a descansar".Recordó que desde el jueves lo mandaron llamar para apoyar en las labores de los incendios en Ciudad Guzmán, en el Nevado de Colima, donde se les complicó porque eran tres incendios distintos y no sabían por dónde empezar."Iniciamos en la noche a combatir el incendio del lado de Atenquique y al día siguiente continuamos por otro paraje. Ayer (domingo) al enterarnos que ya estaba el bosque de La Primavera prendido, nos pidieron de apoyo para acá y regresamos".Antes de partir al sur, recordó, llamó a su esposa y cuatro hijos, y desde entonces no ha tenido comunicación con ellos, pese a que su profesión le presenta riesgos constantes para preocupar a los demás, como lo que le pasó hace un mes en San José de la Montaña, en La Primavera."En un cambio de viento nos agarró cuesta arriba en una cañada, pero bendito sea Dios salimos ilesos, yo nada más en una parte de la cara (se quemó por radiación del fuego), pero todo bien".El presidente municipal de Zapopan, Pablo Lemus Navarro informó que se han presentado varios casos como el de Marco Antonio."Muchos de ellos están sufriendo ya fatiga porque no solamente se trata de las más de 16 horas que llevan en el combate de este incendio, sino que muchos de ellos vienen de combatir el incendio en El Nevado, en Ciudad Guzmán, y se encuentran en una situación de cansancio crónico".LS
