A pesar de una llovizna pertinaz, unas 100 personas se reunieron el sábado para un "servicio de saneamiento" afuera de la sinagoga de Pittsburgh donde la semana pasada ocurrió una masacre de judíos.El ex rabino de la sinagoga Tree of Life (“Arbol de la Vida”) Chuck Diamond dirigió el servicio de 45 minutos que incluyó oraciones, cánticos y poesía. El reverendo Lee Clark, retirado pastor presbiteriano del área de Pittsburgh, ofreció una breve plegaria.Protegiéndose con paraguas, algunas personas lloraron, mujeres abrazaron a niños y parejas se abrazaron el uno al otro.La masacre ocurrió al inicio de un servicio del Shabat, que conmemora el día semanal de descanso, cuando un hombre entró y comenzó a disparar a mansalva, dejando 11 muertos y seis heridos. Es el ataque antisemita más mortal en la historia de Estados Unidos.El jueves, el sospechoso Robert Bowers se declaró inocente de cargos federales de crímenes de odio. Podría enfrentar la pena de muerte.SC
