A cuatro meses desde su apertura, Manpuku Ramen se ha posicionado entre los ramen más demandados en la ciudad. Y no es para menos. Inició con servicio a domicilio y pick up y ahora, con una escueta cantidad de mesas en la banqueta y con un toldo improvisado, dan servicio en insitu. Normalmente hay una fila para comer ahí de hasta una hora. Yo la verdad, es que siempre pido para llevar. El servicio es muy rápido, en cosa de 10 minutos ya estás camino a casa para comer, te ponen todo por separado, por lo que llega muy bien.El lugar es básicamente lo que conocemos como una dark kitchen, es decir; una cocina sin comedor (no sé si a las 5 mesas en la banqueta se le pueda llamar comedor ahora). Ahí, en los 3 metros de frente por los 8 metros de largo (a lo mucho), parece haber una ejercito de personas que trabajan y se mueven en sincronía de la voz de Sho, su dueño. Este nipón, quien después de estar 4 años en la CDMX donde hacía eventos de comida japonesa, vino a establecerse en la Perla Tapatía para ofrecer este delicioso platillo llamado ramen. Para iniciar pedimos takoyaki ($100), son 5 bolitas de pan, fritas, rellenas de pulpo, a las que aderezan con kewpy (que es esta mayonesa japonesa a la que le ponen sólo yemas en vez del huevo entero y un poco de vinagre de manzana), laminas deshidratadas de bonito, cebollín y una salsita agridulce picante deliciosa. ¡Están de 10 y nota! las probé porque no había gyosas, que también están buenazas.De ramen pedimos dos; chashu kakuni ($180), que es de caldo picante, pero reconfortante. El acomodo del platillo está muy bien logrado, solo hay que añadir el caldo y en este caso el picante que viene aparte, como para que te mates solo. El caldo es excelso, de gran sabor y profundidad. Se nota un oficio detrás y el conocimiento de la mezcla de sabores. Tiene láminas de carne de cerdo, elote, naruto (que es esta bonita lámina de blanca con un espiral rosa, mismo que se confecciona con pasta de pescado y que tiene un sabor muy suave), alga y cebollín.El otro fue un karaage Ramen ($166), karaage se refiere al tipo de cocción del pollo, que primero se marina en una mezcla de ajo, soya y jengibre, para después empanizarlo con almidón (ya sea de maíz o papa), lo que hace que quede muy crujiente. La base del caldo es la misma en este caso, que es un caldo a base de miso, que en español significa “fuente de sabor” y que está hecha de pasta de soya.Es muy reconfortante ver cómo va creciendo un negocio al que se le ponen todas las ganas, el movimiento que tiene, al menos en fin de semana cuando he asistido, es increíble. Eso sí, Sho siempre está cuidando hasta el último detalle en cada pedido.¡Sé feliz!AsisteColonias 694, Col. Moderna entre Av Tepeyac y Av Clouthier, Zapopan Horario de todos lo días de martes a domingo de 12:00 PM a 18:00 PM @manpuku_ramen
