Elegir la bebida adecuada en una primera cita puede parecer un detalle menor, pero en realidad puede marcar la diferencia entre una conversación fluida y un encuentro incómodo, la elección correcta no solo refleja tu personalidad y gustos, sino que también puede ayudarte a crear un ambiente relajado y agradable. Desde opciones refrescantes hasta bebidas cálidas que invitan a la cercanía, conocer las alternativas ideales te permitirá disfrutar del momento con confianza y comodidad, dejando que la conversación fluya de manera natural.El trago icónico de Don Draper, ideal para proyectar elegancia y sofisticación. Combina azúcar, un toque de agua, hielo, bíter y, por supuesto, whiskey como protagonista. Su preparación requiere paciencia, pero esa dedicación es parte de la magia que lo hace tan especial. Se sirve con la clásica cáscara de limón, que realza su sabor y presentación.Una opción refrescante y accesible para quienes buscan algo diferente a la clásica Gin Tonic. Este highball se prepara con gin, jugo de limón, azúcar, agua carbonatada y hielo, adornado con una rodaja de limón y una cereza al marrasquino, ese pequeño detalle que le da un toque de clase a la bebida.Un cóctel favorito de los bartenders, con un nombre que llama la atención y un sabor que sorprende. Mezcla gin, licor de marrasquino, Chartreuse verde y jugo de lima, resultando en una bebida llena de carácter y perfecta para animar la velada.Un clásico que ha ganado popularidad entre los jóvenes que buscan sofisticación. Con más de 90 años de historia, combina whiskey de centeno, bíter de Angostura y Peychaud, azúcar y un toque de absenta. Su sabor es profundo y complejo, pero conviene disfrutarlo con moderación.Un cóctel que ha ido consolidándose como un símbolo de elegancia. Preparado con gin, Campari y vermut dulce, se sirve con una cáscara de naranja que aporta un toque maduro y afrutado, perfecto para quienes buscan un trago equilibrado y con carácter.Sencillo, refrescante y siempre confiable. Este clásico es ideal para romper el hielo en una primera cita: ligero, con un toque “travieso” y perfecto para disfrutar despacio. Con uno o dos basta para disfrutar la noche sin perder el control, dejando que la conversación fluya.NA