Un gol de Gerard Moreno le bastó al Espanyol para agitar un partido igualado y derrotar al Betis, que tuvo al tapatío Andrés Guardado como titular.En el primer cuarto de hora, más allá de tiros lejanos, ningún equipo tenía oportunidades claras. Los de Quique Setién disfrutaban combinando y el anfitrión exhibía su velocidad y voluntad, aunque sin pegada.A partir del minuto 16, las revoluciones subieron. Fabián envío un latigazo desde fuera del área hacia el ángulo. Pau López se estiró con velocidad. Fue la mejor ocasión verdiblanca hasta entonces. En el 19’, Gerard Moreno puso la réplica: el catalán, en el área pequeña, cabeceó un córner de Piatti que fue a las manos de Adán.Después fue el turno de Andrés Guardado, muy activo. El jalisciense examinó los reflejos de Pau López, que atrapó el zurdazo. El partido bajó su intensidad en ambas áreas, pero mantuvo el ritmo en las idas y venidas, en la circulación de balón, por parte del Betis, y en las llegadas desde la banda, la mayoría blanquiazules.Desde su llegada al club Betis, el mediocampista tapatío ha demostrado su calidad y se afianzó como el líder de pases a gol en el equipo, que marcha octavo en la tabla general. Cabe destacar que el “Principito” Guardado sigue como líder en asistencias de la Liga, empatado con seis pases de gol con el extremo del Celta de Vigo, Pione Sisto.En los minutos finales de la primera mitad llegó la polémica. El Espanyol pidió penalti por un supuesto agarrón en el área a Hermoso. El colegiado decidió ignorar la acción.Tras el descanso, la iniciativa del Espanyol era mayor. Los de Quique Sánchez Flores salieron dispuestos a desequilibrar el partido, con más presión, hambre e intensidad. El anfitrión tuvo premio muy rápido. En el minuto 54, Gerard Moreno controló entre los centrales con el pecho y firmó un cañonazo imparable.El 1-0, el cuarto gol de Moreno esta temporada, encendió aún más el ímpetu de los catalanes, que se encontraban en su momento más inspirado. El Betis, de todos modos, no perdía la calma ni tampoco su precisión en el pase. Aun así, su frescura arriba había descendido.Ambos técnicos movieron el banquillo y el guión del encuentro no se movió en exceso. Los andaluces tenían problemas para inquietar a Pau López con contundencia, mientras que el Espanyol tampoco se conformaba con replegarse atrás. De hecho, Baptistao y Jurado tuvieron acercamientos peligrosos, sin suficiente puntería.Cuando quedaban cinco minutos, los blanquiazules dieron un paso atrás con la entrada de Diop. Asegurar el resultado era la prioridad. Sergio León tuvo la oportunidad de empatar en el 87’: se plantó con facilidad ante Pau e intentó un tiro cruzado, pero el gerundense sacó una mano estelar.
