Con la vida resuelta, fama y millones de dólares en sus cuentas bancarias, es complicado pensar en deportistas que puedan quedar en la ruina, pero la historia ha mostrado lo contrario y algunos de ellos perdieron todo.Lujos, gastos excesivos, alcohol, mujeres, apuestas, malos manejos y otros aspectos acabaron con la fortuna que lograron leyendas deportivas —futbolistas, boxeadores, tenistas, basquetbolistas y otros— gracias a sus aptitudes en sus respectivos terrenos.Aunque las ganancias de los deportistas profesionales no se comparan para nada en los ingresos de hace medio siglo a la actualidad, desde George Best o Bjorn Borg hasta Mike Tyson o Michael Vick perdieron sus millones de billetes verdes.Best, apodado el “quinto Beatle” y nacido en Belfast, Irlanda del Norte, fue una gran figura del Manchester United en la década de los sesenta. Ganó una Copa de Europa en 1968, ese año le otorgaron el Balón de Oro y su cuenta bancaria lucía de gran forma.Pero gastos excesivos acabaron con su fortuna, lo que él mismo resumió en dos frases: “He gastado mucho dinero en mujeres, alcohol y automóviles, el resto lo he desperdiciado”, y “en 1969 dejé las mujeres y el alcohol, fueron los peores 20 minutos de mi vida”.El “Chico de Belfast” no es el único futbolista que malgastó y perdió sus ingresos a causa del alcoholismo y las mujeres, pues el dos veces campeón mundial brasileño Garrincha y el inglés Paul Gascoigne también despilfarraron su dinero; el sudamericano nunca pudo recuperarse antes de morir.La estrella sueca de tenis y un histórico como Bjorn Borg, ganador de seis títulos de Roland Garros y cinco de Wimbledon, también se vio afectado y rebasado en su vida personal por distintos motivos.Su primera esposa, Loredana Berte, manifestó alguna ocasión que la cocaína y las malas compañías acabaron con Borg y sus ganancias estimadas en casi cuatro millones de dólares, sólo en lo deportivo, y quien incluso estuvo cerca de subastar sus trofeos de Wimbledon.Christian Vieri, dos veces mundialista en Italia y quien militó en equipos como Juventus, Milan, Atlético de Madrid o Mónaco, malgastó su dinero en apuestas y malas inversiones, además de las mujeres.Ubicados en la cima de sus respectivas carreras profesionales, la ausencia de asesoramiento es uno de los principales factores que golpean a esos ídolos de la afición, quienes ante la ausencia de educación financiera acaban por perder todo.Uno de los deportes que más ingresos puede generar para una sola persona es el boxeo y legendarios pesos completos estadounidenses como Mike Tyson o Evander Holyfield, con ganancias millonarias en su carrera y que perdieron todo.Tyson, de quien se dice ganó más de 300 millones de dólares, se declaró en bancarrota luego de una vida de excesos, lujos y excentricidades, como tener de mascotas dos tigres de bengala y hacer fiestas llenas de alcohol y drogas.Culpable tras ser acusado de violación en 1992 y sentenciado a seis años de prisión, aunque salió antes de los cuatro por buena conducta, se declaró en bancarrota en 2003.Aunque no presume sus ganancias de antes, ahora vive bien gracias a sus apariciones en televisión e imagen, pero es una clara de cómo los malos manejos pueden acabar con miles y miles de billetes verdes.Otro ex pugilista que despilfarró su fortuna fue uno de los más grandes rivales de Tyson, Evander Holyfield, quien llegó a comprar una mansión con 109 habitaciones y 17 baños, misma que tuvo que subastar en 2008.Holyfield, quien ganó unos 30 millones de dólares en la segunda pelea con Tyson, incluso fue demandado por la madre de uno de sus hijos por no pagar la pensión alimentaria.Dos compañeros del astro de basquetbol Michael Jordan que se vieron beneficiados del gran momento que vivieron en la década de los noventa, Scottie Pippen y Dennis Rodman, tomaron decisiones equivocadas que acabaron con su patrimonio.Pippen, el inseparable compañero de Jordan, tuvo ganancias superiores a los 100 millones de dólares, pero algunas inversiones no resultaron como esperaba y perdió todo, incluso se menciona que su asesor financiero lo desfalcó.Rodman, quien fue parte del segundo tricampeonato de los Toros de Chicago, también vivió problemas complicados con el alcohol, drogas y mujeres para perder su dinero y declararse en bancarrota en 2012.Otros basquetbolistas que malgastaron su fortuna de más de 100 millones luego de contratos firmados son Allen Iverson y Antoine Walker, el primero rodeado de amistades negativas a las que mantenía y el segundo que gastó todo con familiares y amigos.Entre los casos más recientes, el mariscal de campo de la NFL, Michael Vick, tuvo un contrato de más de 100 millones, pero tras ser culpable de organizar peleas de perros y estar preso su carrera se vino abajo y su fortuna también.El golfista John Daly gastó gran parte de su fortuna en apuestas y no le fue nada bien, pues él mismo ha confesado que perdió más de 50 millones de billetes verdes.JL
