Vecinos, extrañados por operativo militar en Zapopan

GUADALAJARA, JALISCO (30/ENE/2014).- Los gritos le espantaron el sueño. Esas voces que daban órdenes y hablaban de armas se escuchaban con más y más claridad. Cuando María, que pide no dar su nombre real, se asomó a la calle, vio entre arbustos a dos militares que con sus armas largas apuntaban a su casa, en el fraccionamiento Patria Universidad.
 
Eran las 4:30 de la mañana y ya no pudo dormir. Permaneció adentro y acostó a su hijo de tres años. Un rato después llegaron unos militares a interrogar a su papá; qué cuántos vivían ahí, que a qué se dedicaban, pero no tardaron más de dos minutos.  
 
María alcanzó a ver que no era sólo en su casa, en la calle William Shakespeare, donde se hacían interrogatorios. De ahí no pudo salir hasta las 10:00 de la mañana, entonces todavía mantenían acordonada la calle Artemio del Valle Arizpe, donde está la casa que presuntamente era el objetivo de los militares.
 
"Es una colonia tranquila. Nunca habíamos tenido algún reporte de alguna anomalía o personas que fueran sospechosas".
 
Con la misma extrañeza habla el matrimonio de Lorena y Javier, que piden guardar su verdadera identidad y viven a la vuelta, en la calle Ernest Hemingway. Nunca algún movimiento raro o persecución, ni siquiera robos o asaltos por la zona. Lo que sí llamaba la atención eran fiestas que hacían, con seis horas de mariachi, que no paraba de complacer con canciones en toda la noche.
 
Hoy en la mañana su hija salió, como todos los días, a las 7:00 al gimnasio. Arriba de su camioneta la pararon los militares para hacerle preguntas y sin forcejeo le dejaron paso libre. "Son amables", describe el matrimonio a los elementos de las fuerzas armadas.
 
Este hecho no roba su tranquilidad, ni cambiará sus rutinas, coinciden vecinos, la zona continúa segura y si hubo una movilización de este tipo, es señal de que hay presencia de autoridades, complementa Javier.