Investigan a hombres arraigados por varios delitos

GUADALAJARA, JALISCO (08/MAY/2010).- La Procuraduría de Justicia del Estado (PGJE) mantiene bajo arraigo a dos sujetos relacionados con los delitos en los que presuntamente participó el agente investigador Benjamín Mora Ramírez, de 28 años, quien el día de ayer fue trasladado al reclusorio preventivo metropolitano, con base en una orden de aprehensión obtenida en el Juzgado Tercero de lo Penal.

Quienes se encuentran bajo arraigo son: Cristopher Oswaldo Loreto Torres, alias “El Cris”, de 22 años de edad, vecino de la calle Ixtépete, en Villas Perisur, en el Municipio de Zapopan, quien tiene antecedentes penales por portación de arma de fuego, y Marco Antonio Duarte Hernández, de 37, vecino de la colonia Haciendas de Santa Fe, en Tlajomulco de Zúñiga, quien era elemento de seguridad privada.

Cristopher Oswaldo está acusado de participar en el homicidio de Carlos Alberto Rayas Rodríguez, junto con el investigador Benjamín Mora, pues el día de los hechos (3 de abril de 2010) se hallaban a bordo de un vehículo Volkswagen Bora, estacionado en avenida Valdepeñas y Periférico Norte, por donde vieron pasar al jefe de la División de Homicidios Intencionales y lo siguieron y luego dieron aviso para que dos sujetos que iban en motocicleta cometieran el atentado. También están señalados de participar, de manera similar, en el asesinato de un abogado y su hijo, llevado a cabo en un hospital privado (San Javier) el 13 de junio de 2009.

Los fallecidos fueron José Rafael Negrete Casulleros, de 50 años, y Rafael negrete Tinajero, de 22, quienes fueron agredidos con armas calibre 9 milímetros.
El doble homicidio ocurrió cuando el primero de ellos convalecía tras haber sido lesionado con armas de fuego el 8 de mayo de 2009, en Ciudad Bugambilias.
Los tres también tendrían que ver con una serie de robos a casa-habitación, algunos de ellos cometidos en Ciudad Bugambilias.

Por lo que Benjamín Mora deberá responder por los delitos de homicidio calificado, delincuencia organizada y delitos cometidos contra representantes de la autoridad, por el asesinato del jefe de la división de Homicidios Intencionales Carlos Alberto Rayas Rodríguez.

Se continúa investigando su participación en otros de los hechos ya señalados, en tanto sus dos presuntos cómplices permanecen bajo arraigo.
Se les involucra en el  asesinato de dos abogados, padre e hijo, y por robos a casas habitación.

El día de los hechos un par de motociclistas detonaron al menos nueve disparos en la camioneta del ex fiscal de homicidios.