GUADALAJARA, JALISCO (31/AGO/2017).- De acuerdo con la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), de los ocho mil 703 solicitantes de refugio que se contabilizaron en lo que va del año, dos mil 443 (28%) son hondureños y dos mil 113 (24%) son venezolanos.El delegado del Instituto Nacional de Migración (INM) en Jalisco, Ricardo Vera, afirmó que el fenómeno es similar en la Entidad. El funcionario precisó que entre enero y agosto de 2016 tuvieron 34 peticiones. Sin embargo, en el mismo periodo de este año se reportaron 180: 122 provinieron del país que gobierna Nicolás Maduro.Vera resaltó que, si bien los hondureños y salvadoreños que migran sin documentos viven una situación de vulnerabilidad, viajan en medios de transporte de alto riesgo y pernoctan en sitios despoblados para evitar el contacto con las autoridades, los venezolanos deben demostrar que se encuentran fuera de su país porque su vida, seguridad y libertad han sido amenazadas.“El hecho de que un país experimente una situación de violencia generalizada, conflictos armados, violación masiva de derechos humanos u otras circunstancias que perturben el orden público no constituye por sí mismo motivo suficiente para que todo nacional de dicho territorio pueda ser reconocido como refugiado”.Para Iliana Martínez, académica del ITESO, uno de los factores del incremento de peticiones de refugio en el último lustro (en 2013 hubo mil 296 y en 2015, mil 424) fue el trabajo del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), que capacitó y apoyó a organizaciones que se dedican a atender a migrantes en tránsito.Alonso Hernández, coordinador del centro de atención a migrantes FM4 Paso Libre, aseguró que actualmente la organización da acompañamiento a 20 casos de extranjeros que buscan permanecer en el país como refugiados.
