Coinciden en necesidad de redensificar la ciudad

GUADALAJARA, JALISCO (29/MAY/2013).- En el debate sobre la redensificación urbana en Guadalajara diferentes expertos coinciden, a grandes rasgos, en la necesidad de reagrupar la metrópoli, que desde hace años ha crecido horizontalmente rebasando todos sus límites.

El arquitecto Álvaro Morales Hernández del despacho Echauri Morales, encargado de desarrollar el proyecto del Puente Atirantado y del Centro Cultural Universitario de la UdeG, entre otros, destacó que “densificar es una forma más sustentable de hacer ciudad, por lo que es imprescindible tener cada vez más edificios en altura, pero esto no bastaría. La idea es tender a ciudades más complejas, que consiste en integrar la mayor cantidad de actividades en entornos reducidos, de hacer barrios tendientes a la autosuficiencia, con usos mixtos del suelo, con desplazamientos cortos y de preferencia peatonales, donde se puedan realizar todas las actividades normales de la vida cotidiana, compras, recreo, esparcimiento, educación, culto en tu entorno inmediato.”

Por su parte, el Secretario Técnico de la Junta de Coordinación Metropolitana, Alberto Orozco Ochoa, puntualizó que lo que propicia la proximidad física entre los habitantes “no es más que el resultado de una eficaz estrategia de compactación de la metrópoli”, aunque señaló también que en muchos casos conlleva efectos colaterales negativos, como el caso Portland, Oregon, donde se observó la disminución sustancial de vivienda accesible, el encarecimiento generalizado del suelo urbano, “además de contraer mayores problemas de tráfico vehicular y centenares de demandas contra las autoridades”, apuntó el especialista.

Mario Silva, integrante del Colectivo Ecologista Jalisco, defendió que la alternativa correcta esla estrategia de repoblamiento de ciertas centralidades de los municipios que integran el Área  Metropolitana de Guadalajara. “La aprobación de vivienda vertical con alturas controladas, es una opción”, refirió y aconsejó tomar el concepto de “capacidad de carga” que se usa en la Ecología como ciencia para medir bien cuál es la cantidad de recursos, energía y población que puede soportar un territorio.

De acuerdo a Álvaro Morales, la densidad, la complejidad y la solidaridad son los tres pilares que deben integrar un nuevo modelo de ciudad. “A Guadalajara le urge densificar y con esto paliar la huella ecológica y el crecimiento absurdo de la zona metropolitana”. Para solucionarlo plantea promover desarrollos inmobiliarios en centros urbanos que en lugar de pagar cuotas generen equipamientos, mejoramiento de la imagen urbana y áreas verdes, entre otras medidas.

Parte del reto, considera Alberto Orozco, implica salir del fondo del discurso recurrente en el que todos nos reconocemos: “aquí no, no en el patio de mi casa"; pues en “cualquier comunidad hay residentes que se opondrán a programas de vivienda subsidiada (la que hoy se considera más sustentable) en áreas cercanas o dentro de su vecindad.”