Viernes, 03 de Mayo 2024
Jalisco | Docenas de personas reciben solsticio de invierno y el fin de un periodo maya

Celebran la nueva era en el Centro Arqueológico del Ixtépete

Cerca del medio día, dos docenas de personas se dieron cita para recibir el solsticio de invierno y el fin de un periodo maya

Por: EL INFORMADOR

El centro arqueológico recibe a personas que llegan a darle la bienvenida, a lo que dicen, es el inicio de una nueva era.  /

El centro arqueológico recibe a personas que llegan a darle la bienvenida, a lo que dicen, es el inicio de una nueva era. /

GUADALAJARA, JALISCO (21/DIC/2012).- La próxima vez que puedan presenciar el fin de una era será en 26 mil años. No más, tampoco menos. Su nombre es Georgina Pérez Huerta, tiene 34 años de edad y en los últimos ocho su fervor ha cambiado, de ser una católica devota, ahora sigue creyendo en Dios como un ser multidimensional. Cree en las energías positivas, y por eso, al igual que dos docenas de personas, recibió el solsticio de invierno  en el Centro Arqueológico El Ixtépete. "Porque decir que hoy se acaba el mundo es para gente que no entiende la espiritualidad y los ciclos astrales".

Georgina lidera un grupo de cinco personas que, formadas, se ponen frente al sol. Lo miran de frente y lo encaran con cariño. Suben sus brazos y abren el compás de sus piernas con la misma sintonía como quien baila en una boda. Georgina declama: "Estoy señor frente a ti, en este inicio de era, en este nuevo ciclo de nuestra madre tierra y de cada uno de nosotros, todas las cosas que me diste y todas las cosas que adquirí te las entrego; vacío mi alma de rencores, resentimientos, frustraciones, pobreza, enfermedad, tristeza, agonía, abatimiento y todas las cosas que sirvieron para mi crecimiento".

Ella es una microempresaria que desde que decidió venir a estos ritos, dice, la vida le ha cambiado. De ojos negros, piel morena y complexión robusta, la artesana dice que por alguna circunstancia no llega a la cita de los equinoccios del 21 de marzo. "Siento que en todo el año no aprendo lo mismo. No me conformo con saber lo que dicen las noticias, me gusta indagar quiénes somos como un espíritu, más allá del cuerpo".

El abecedario elevado


H y sus 12 amigos están fumando hachís, inhalan para relajarse porque aquí, en el Ixtépete, el abandono de la zona arqueológica dice que incluye tolerancia gubernamental. H está contento y se raya la cara con pintura vegetal. H no lo sabe, pero hoy el solsticio de invierno, no entró a las 00:00 horas sino a las 07:12 de la mañana. Dice que hoy le tocó "que el sol nos saludara. Hubo mucha gente, hasta los de TV Azteca se dejaron caer".

H dice que en cuanto se les pase el efecto se irán a su casa, porque hay que trabajar "y sacar para los regalos de navidad". Su amigo L muestra un brazo pintado de azul, verde y blanco que dice que es el continente americano, "hay que llevar a la naturaleza aquí, cerquita del corazón", y se empuja el papel arroz.

Cerca de las 12:00 horas, el centro arqueológico localizado en Zona Metropolitana de Guadalajara, al que Phil Weigand denominaba "de segundo rango", aun recibía personas que llegaban como Georgina; se instalaban en lo alto de la pirámide central, abrían el compás, respiraban una y otra vez y así, poco a poco, le daban el abrazo de bienvenida a lo que dicen, es el inicio de una nueva era.

EL INFORMADOR / OMAR GARCÍA

Temas

Lee También

Recibe las últimas noticias en tu e-mail

Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día

Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones