A PROPÓSITO

En lo que acaban de despejarse las incógnitas con respecto a los equipos pendientes de sacar boleto para la “Liguilla” —el verdadero campeonato, del que la llamada “etapa clasificatoria” viene a ser el preámbulo—, y en lo que se define cuáles de los ocho  aspirantes (Guadalajara, Cruz Azul, San Luis, Necaxa, Pachuca, Puebla, Atlas y UNAM) consiguen las plazas que dejaron disponibles los ya clasificados Santos Laguna, Toluca, Chiapas y Monterrey, y en lo que se define, por otra parte, qué equipo tomará la plaza que el Veracruz —condenado a pasarse al menos un año en el purgatorio de la división de ascenso— dejó vacante, de España llegan noticias inquietantes con respecto al futuro de dos futbolistas mexicanos que actualmente “hacen la Europa”...

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Se trata de la decisión tomada, al parecer, por los dirigentes del Barcelona. Habida cuenta de que el equipo, lejos de apretar el paso para arrebatar el gallardete al Real Madrid, declinó y aparentemente llegó a los límites de las posibilidades de su plantel, todo sugiere que —como aquí, salvadas todas las distancias, en el caso del América— los afanes se orientan a una reestructuración: a la promoción de algunos jugadores con futuro, que han tenido relativamente poca actividad; a la adquisición de otros tantos, capaces de acrecentar las perspectivas del cuadro “culé” para la próxima temporada... y, en consecuencia, a la transferencia de algunos más cuyo costo, quizá, está por encima de su rendimiento.

Al margen del éxito que pudiera haber en la transferencia de Ronaldinho al Milan —donde probablemente Ronaldo cause baja, en parte por su lesión... y en parte por los recientes escándalos de que ha sido protagonista, a todas luces impropios de un deportista que en todos los órdenes de la vida debería ser modelo para los jóvenes—, que se viene cocinando desde hace varias semanas, en la lista de posibles transferibles se incluye a los mexicanos Rafael Márquez y Giovani dos Santos.

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En el primer caso, sin cancelar la posibilidad de que aún encuentre mercado en el futbol del Primer Mundo, es probable que Rafa, en el Barcelona, haya llegado al tope de sus posibilidades. En el de Gío, es de suponerse que ya se midieran sus alcances y se concluyera que no volará tan alto como en un momento determinado llegó a suponerse.

En ambos casos..., al tiempo.

EL INFORMADOR / Redacción/  EMD     03/ 05/ 08