* Más dudas

Al margen de la derrota ante Estados Unidos --no por previsible menos lamentable--, el episodio del miércoles en Columbus a

crecentó las dudas de los observadores (y posiblemente también las del técnico nacional, Sven-Goran Eriksson) con respecto a varios jugadores a los que hasta ahora ha distinguido con el rango de seleccionados nacionales...

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Es probable que la fórmula ofensiva que intentó de entrada en el primer compromiso del hexagonal de la Concacaf por los boletos para el Mundial del año próximo en Sudáfrica, resista ser sometida a nuevos exámenes.

Si el bloque integrado por Medina, Ochoa, Giovani y Castillo resultó, ante los estadounidenses, tan inoperante como todas las combinaciones que vieron acción en la “era” precedente --la que fracasó en la conquista del boleto para los Juegos Olímpicos... y, por ende, de las medallas que prometió el vendedor de saliva endulzada que antecedió a Eriksson en el timón del “Tri”--, quizá sea recomendable darles la oportunidad de recuperar la confianza en sí mismos, y, por ende, el crédito de la opinión pública en los encuentros ante Costa Rica, Honduras y El Salvador.

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Otro tanto puede decirse de Oswaldo Sánchez y Rafael Márquez...

Los dos jugadores, instalados por méritos propios en el sitial de baluartes del equipo nacional, compartieron el indeseable rol de “chivos expiatorios” en la aciaga jornada de media semana. Sin embargo, como ambos tuvieron la honestidad de reconocer sus errores --Márquez, el de haberse hecho expulsar; Oswaldo, el de haberse tragado el segundo gol estadounidense--, es casi seguro que, una vez que Rafael cumpla el castigo inevitable, Eriksson les brinde la oportunidad de reivindicarse.

Después de todo, ninguno de los dos podía jactarse de ser el primer mortal exento del riesgo de cometer errores.

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En lo que el tiempo permite discernir si son peras o son manzanas, se cierra el telón en la pista correspondiente a la actividad de la Selección y de la Copa Libertadores, en la que el Guadalajara consiguió nota aprobatoria ante Lanús y el San Luis salió vapuleado ante San Lorenzo, para regresar a la competencia doméstica. En ella llaman la atención dos encuentros: el Jaguares-América y el Atlas-Atlante, por el morbo que significa ver el inicio de las “eras” de Chucho Ramírez con los capitalinos y de Ricardo La Volpe, cobijado por el calor de su público, con los rojinegros.