* “Extras”

De momento, al menos, los dirigentes del Guadalajara no tienen demasiada prisa en que el “Rebaño Sagrado” trepe los 47 peldaños que le faltan para alcanzar una de las metas que se trazó el actual dueño del juguete cuando se hizo cargo de sus --hasta hace poco tiempo-- erráticos destinos: convertir al que ya era el equipo más popular de México, en “el mejor equipo del mundo”...

De momento, con que se consiga salir de los lugares más rezagados en el tabulador de su grupo y ascender a otros desde los cuales pueda alimentarse el anhelo de dejar de ser “extra” y convertirse en protagonista del certamen doméstico, sería más que suficiente.

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Por supuesto, si resulta sorprendente que las “Chivas Rayadas” aparezcan en el escaño 48 de la clasificación de la Federación Internacional de Historia y Estadísticas del Futbol, resulta asombroso que al Atlas se le haya asignado el sitio número 50 en la misma lista... y escandaloso --por decir lo menos-- que el América esté registrado, orgullosamente, en el lugar número 28.

A pesar de que llevan años y felices días --lo de “felices” es un decir...-- sin dar pie con bola, y más de medio siglo arrastrando la cobija, con contadísimas aproximaciones a los primeros niveles del futbol casero, los rojinegros, inexplicablemente, aparecen mucho mejor considerados, por ejemplo, que los dos más recientes campeones mexicanos. (El Santos Laguna, en efecto, aparece en el modesto escaño 150 de la lista; el Atlante, en el aún más modesto lugar 217).

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Sotanero de la clasificación general en el anterior Torneo de Clausura, en trance de repetir el papelón en el actual de Apertura --si el “Pelado” Ramón Díaz y los “refuerzos” que se adquirieron no hacen el milagro que les encomendaron sus dirigentes--, el América, sin embargo, aventaja en ese peculiar “ranking” a equipos como el Sevilla (29), Colo-Colo (31), Flamengo (32), Liga Deportiva Universitaria de Quito (35), Cruzeiro de Belo Horizonte (38)... o Real Madrid (42). Lo de menos es que todos estos hayan enriquecido con títulos nacionales o internacionales, recientemente, sus respectivos historiales, y que el cuadro capitalino no haya pasado de ser, hasta cierto punto, “candil de la calle” --merced a las campanadas que le permitieron llegar hasta la fase semifinal de la más reciente edición de la Copa Libertadores--... y casi absoluta “oscuridad de su casa”.