* De lengua

A Aarón Galindo le bastó un partido —el del sábado pasado en Monterrey— para convencer a Sven-Goran Eriksson de que, luego de su destierro de varias temporadas en Europa, sigue siendo jugador de Selección Nacional. Carlos Ochoa y el “Venado” Medina conservan esa jerarquía, principalmente porque el Guadalajara, con un empate (ante Cruz Azul) y dos victorias (sobre “Tecos” y rayados) como tarjetas de presentación, ha tenido un excelente arranque de temporada.

Ninguno de los tres, concentrados con el “Tri” que la semana próxima tendrá su prueba de fuego ante Estados Unidos en el arranque del hexagonal de la Concacaf, podrá alinear esta noche ante el Necaxa en el Estadio Jalisco. Lo cual, sin embargo, de ninguna manera significa que el “Rebaño” vaya a dar al adversario la ventaja de jugar con ocho.

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De hecho, dada la carga de trabajo que tendrán los rojiblancos durante el mes de febrero, cada partido es una excelente oportunidad de demostrar si es verdad o mera ilusión que hay plantel para alcanzar las ambiciosas metas que sus dirigentes se han trazado...

En el Torneo de Clausura en curso, está vigente el reto que se desprendió de que el cierre del certamen anterior no estuvo a la altura del espectacular comportamiento que tuvo el equipo durante la etapa clasificatoria. Para decirlo con el lenguaje popular: tras un arranque “de caballo fino”, en la recta final se tuvo un desempeño más propio de un jamelgo agobiado por la carga de los años.

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Pero hay más: al margen de los compromisos de la Selección Nacional y de las bajas obligadas para el plantel, en el curso de las cuatro semanas justas que tiene febrero, el Guadalajara solventará, sumados los de la competencia doméstica con los de la Copa Libertadores, la friolera de once compromisos en la agenda.

Si se observa que ha habido jugadores (Gonzalo Pineda, Sergio Ávila y Marco Fabián) que han externado su malestar porque todos han recibido “probaditas” en el primer equipo pero ninguno se ha consolidado como titular, el trajín a que será sometido el plantel seguramente dará oportunidad a todos.

Ya se verá, a partir de esta noche, en función del desempeño que tengan los reemplazantes de Galindo, Medina y Ochoa, si son tan buenos en la cancha, hablando con los pies, como lo son en los medios de comunicación, jugando con la lengua, los inconformes.