Desde hace ocho meses, Karla busca a su esposo Arturo, quien desapareció el 7 de enero en la colonia Patria Nueva.En su búsqueda ha acudido al Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses (IJCF), ubicado en el fraccionamiento Revolución, en Tlaquepaque, en reiteradas ocasiones.La última vez, después del hallazgo de 119 bolsas en un predio de la colonia La Primavera, en Zapopan.“Me muestran fotos, pero son las mismas de siempre. El lunes me enseñaron fotos de unas cabezas, unos torsos y dos estaban engusanados, cuando se supone que no deben presentar en esas condiciones un cuerpo, aunque sean fotos”, denuncia.Y no es la única. “María”, quien prefirió mantener el anonimato, acude desde hace cuatro meses y en ese tiempo le ha tocado enfrentar esta situación.“No los lavan, no los limpian… nada. Así como los sacan de la fosa o como los hallan, con los gusanos saliéndose, así nos los enseñan”, cuenta.Los colectivos piden que la Fiscalía General de la República (FGR) apoye con peritos, antropólogos, médicos forenses y todo el personal especializado para ayudar al Gobierno estatal.“Sí hay una crisis, aunque (Enrique) Alfaro, el fiscal y Macedonio (Tamez) digan que no”, comenta Karla.
