De acuerdo con el informe especial “Sobre los Centros de Tratamiento Interno para Adolescentes que Infringen la Ley Penal de la República Mexicana”, que la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) presentó en mayo, las fallas en dos de estos espacios en Jalisco “castigan” a los jóvenes.El organismo encontró que el Centro de Atención Integral Juvenil, ubicado en El Salto, y el Centro de Observación, Clasificación y Diagnóstico, alzado en Zapopan y conocido como “Tutelar de menores”, tienen en mal estado los dormitorios y los baños, registran carencias de personal médico y de seguridad, y ofrecen alimentos inadecuados a los 80 adolescentes que pasan ahí su proceso de reinserción.En el documento se destacó que, en el caso del primer sitio mencionado, no hay inodoros. En el segundo se resaltó que las áreas para dormir, de visita, la cocina y los talleres se encuentran en malas condiciones de mantenimiento e higiene.Además, hay filtraciones y faltan vidrios en ventanas. Las regaderas y los lavabos no funcionan y los inodoros carecen de agua corriente.Ante esta situación, el director jurídico de Reinserción Social de Jalisco, Roberto Lares Gil, afirmó que cuentan con camas y colchones. Y aunque aceptó que en algunos hacen falta láminas de policarbonato a las ventanas, esto sólo ocurre en los módulos en desuso.“La visita de la CNDH la tuvimos en agosto de 2018, cuando la administración pasada iba de salida y parecía que ya le ponía poco interés a inyectarle recursos a los centros penitenciarios. A raíz de que llegamos se empezaron a hacer las gestiones y evaluaciones necesarias para trabajar sobre ellos”, expresó.El funcionario agregó que desde el arranque del actual Gobierno, se han remozado las instalaciones. Este medio de comunicación solicitó acudir a ambos inmuebles para constatar los cambios. Sin embargo, dicha petición no fue atendida.En el informe especial “Sobre los Centros de Tratamiento Interno para Adolescentes que Infringen la Ley Penal de la República Mexicana”, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) también detectó que en el Centro de Atención Integral Juvenil, ubicado en El Salto, y el Centro de Observación, Clasificación y Diagnóstico, en Zapopan, hay confusión entre procedimiento y tratamiento en internamiento.En el documento se destacó que los insuficientes médicos, que trabajan en áreas sin mantenimiento ni higiene, no llevan un registro de consultas a los jóvenes ni supervisan la elaboración de los alimentos que se les entregan.Otra falla es que los sitios referidos carecen de programas contra las adicciones y para el tratamiento de desintoxicación.Ante estos problemas de procedimientos y manuales de operación subrayados por el organismo, el director jurídico de Reinserción Social del Estado, Roberto Lares Gil, admitió que los reglamentos son obsoletos, pues fueron aprobados en los años ochenta.El funcionario agregó que ya se trabaja en la conformación de la normativa para estos lugares.Con respecto al señalamiento sobre la falta de personal como custodios y médicos, Lares Gil dijo que ya contrataron a 50 guardias para todo el Sistema de Reinserción Social.En el caso de los galenos, acentuó que en los inmuebles siempre hay un médico de planta y los adolescentes también son apoyados por profesionales del Hospital Civil de Guadalajara que se trasladan hasta los centros. En lo tocante a las mujeres, aseguró que son visitadas hasta dos veces por semana por ginecólogos del Sistema.Carlos Gómez, jefe del área penitenciaria de la Comisión Estatal de Derechos Humanos Jalisco (CEDHJ), comentó que las anomalÍas detectadas por la CNDH no pueden ser ignoradas sólo por no encontrarse en su máxima capacidad.Harán popotes ecológicosEl director jurídico de Reinserción Social, Roberto Lares Gil, compartió que, para emplear a los adolescentes privados de la libertad en Jalisco, pondrán en marcha un proyecto de elaboración de popotes ecológicos.El funcionario estatal destacó que además hay un empresario interesado en capacitar a los jóvenes en el cultivo de hidroponias, con la finalidad de brindarles herramientas para que, al salir del centro, puedan contar con un oficio innovador.Los trabajadores de la CNDH observaron que algunos jóvenes instalados en los centros de reinserción de El Salto y Zapopan cuentan con televisores, equipos de sonido y consolas de videojuegos.Carlos Gómez, jefe del área penitenciaria de la Comisión Estatal de Derechos Humanos Jalisco (CEDHJ), explicó que los aparatos se encuentran en las áreas comunes y no en los dormitorios.El Artículo 50 de la Ley Nacional del Sistema Integral de Justicia para Adolescentes establece que tienen derecho a consultar prensa escrita, radio y televisión mientras no perjudiquen su desarrollo dentro de los centros.Por su parte, el Reglamento del Centro de Observación de Menores del Estado de Jalisco indica en su Artículo 46 que el uso de estos dispositivos podrá formar parte de las técnicas de reinserción, siempre y cuando los programas a ver y escuchar sean seleccionados por los preceptores.El director jurídico de Reinserción Social, Roberto Lares Gil, aseguró que el área psicológica evalúa los programas, películas o música. Los contenidos deben evitar en todo momento la violencia.“Cuando un juez impone una medida de prisión preventiva a un adolescente en conflicto con la ley, lo priva únicamente de sus derechos de tránsito, así como de los político-electorales. Sin embargo, no lo priva de sus derechos humanos, y consideramos que este es un derecho humano”.TELÓN DE FONDO“Pertenecía a una pandilla. Unas semanas antes mataron a un amigo de la pandilla y nos avisaron que seguía yo. Entonces me conseguí un arma para estar preparado y justo en esa semana pasaron por mi casa los que mataron a mi amigo, les tiré y maté a uno, a otro lo dejé herido”.Este testimonio pertenece a un joven jalisciense y forma parte del informe especial “Adolescentes: Vulnerabilidad y Violencia”, que publicaron la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) y el Centro de Investigación y Estudios Superiores en Antropología Social (CIESAS), que se presentó a finales de 2017.En el estudio se destacó que se llevaron a cabo 730 entrevistas a adolescentes que se encuentran privados de su libertad en 17 entidades por infracciones graves y por el uso de la violencia.De esta cantidad, se precisó que 36 jóvenes fueron abordados en Jalisco. En el documento se resaltó que, dentro de las modalidades de la actividad delictiva cometida por ellos, 22% correspondió al crimen organizado, 31% a las pandillas y 47% a actos individuales.Por otra parte, también se agregó que los principales ilícitos por los cuales se registró el internamiento de 271 jóvenes en tres centros de la Entidad fueron robo con violencia, homicidio, secuestro, robo de vehículo, delincuencia organizada, violación y parricidio.Trabajo. El informe de la CNDH se llevó a cabo de abril de 2018 a marzo de 2019. Participaron trabajadores del organismo y de los entes estatales en la materia.Recorridos. Se hicieron visitas de supervisión a 45 centros de tratamiento interno que funcionan en los 32 estados del país para examinar el trato y condiciones de detención de los adolescentes.División. Se encontró que 6 son varoniles, 35 alojan a hombres y mujeres y 4 son exclusivos para personas del sexo femenino.Sitios. Los centros cuentan con una capacidad instalada de seis mil 866 espacios.Procesos. En las visitas se encontraron mil 445 internados: 431 sujetos a procedimiento y mil 014 que están cumpliendo una medida de tratamiento.
