El 2020 ha resultado, sin duda alguna, ser un año sin precedentes. La pandemia derivada del COVID-19 alteró radicalmente el estilo de vida y la rutina de trabajo de la mayoría de las personas alrededor del mundo, ocasionando también un grave desajuste en la economía y en cada uno de los sectores que la conforman. Por iniciativa de empresarios y diversos sectores de la sociedad, en alianza con el Gobierno de Jalisco, nació el programa “Jalisco sin hambre”, que tiene como objetivo dotar de productos de la canasta básica a los jaliscienses en situación de la calle, familias en zonas de alta marginación, personas con discapacidad, entre otros.Desde que inició la iniciativa el pasado 15 de abril, Expo Guadalajara es la casa de las líneas de producción que hacen posible la elaboración y el armado de las despensas con los recursos e insumos donados por empresarios y particulares.“Jalisco Sin Hambre” comenzó en un espacio de cinco mil 728 metros cuadros en el recinto y con el arduo trabajo de 32 colaboradores en el armado de despensas. A partir del 18 de mayo, debido a la alta demanda de producción se agregó una segunda línea de embalaje, lo que significa la participación simultánea de hasta 60 colaboradores de todas las gerencias del recinto: Gastronomía, Comercial, Operaciones, Administración y Dirección. Así, 88% del total de colaboradores de Expo Guadalajara ha participado en las líneas de producción, lo que se traduce en la elaboración al día de hoy de más de 149 mil 800 despensas. Además, el recinto continúa con la recepción y operación de eventos corporativos de menos de 50 personas, pero sus esfuerzos y funcionamiento se ha enfocado principalmente en atender el programa “Jalisco Sin Hambre”, que brinda a cada uno de los participantes la satisfacción de colaborar por el bien de la sociedad jalisciense con el armado de hasta cinco mil despensas por día.
