En las entrañas del Vaticano se gesta una guerra. Una disputa férrea que cada día es más obvia y pública, entre los conservadores -que por lo menos durante más de tres décadas han marcado la pauta en la iglesia católica- y el Papa Francisco que buscan ‘actualizarla’ a los tiempos y nuevas costumbres. Un Papa que de diferentes maneras ha mostrado su extrañeza y descontento al conservadurismo que muestran un elevado grupo de representantes de la iglesia, sobre todo en Estados Unidos, donde ha encontrado a un núcleo de sacerdotes que buscan bloquear aquellos intentos que buscan modificar algunas reglas que han predominado en el catolicismo por siglos.Se habla entre los conservadores del fomento de “una cultura de terror” surgida desde la cúpula del Vaticano, donde hay temores de que en todos los rincones existan ‘espías jesuitas que informan a Francisco”, según revelan diferentes publicaciones, sobre todo en Estados Unidos y en Alemania.Las diferencias salieron mas a flote la semana anterior en la conferencia episcopal en Estados Unidos, donde los obispos acordaron redactar una declaración sobre el sacramento de la comunión, en un intento directo por negar la eucaristía -entre otros- al presidente Joe Biden por apoyar el derecho al aborto. En la misma reunión, los obispos conservadores se calificaron como “los defensores de la verdadera fe” y se dijeron -algunos de ellos- “perseguidos” por los cristianos liberales, un sector importante de la sociedad y en muchas ocasiones por los medios de comunicación. El voto de la declaración -168 a favor y 55 en contra- demostró los grietas que hay al interior de la iglesia católica estadounidense que ha sido golpeada por la serie de escándalos de abusos por algunos de sus miembros y que -entre otras cosas- han repercutido entre la feligresía que en un 20 por ciento se ha retirado de la iglesia, según un estudio del Instituto Gallup.Y en medio de esta lucha en Estados Unidos, la política juega un papel importante, sobre todo en cuanto al mensaje y contra quien va dirigido. De acuerdo con un documento del Instituto de Investigaciones Pew, seis de cada diez electores católicos blancos son republicanos. Es por ello que muchos legisladores republicanos han querido aprovechar la sinergia del tema para tener un conducto mas para atacar al presidente Biden por su posicion a favor del aborto.Desde el Vaticano no ha habido respuesta -hasta el momento- a la decisión de los obispos en Estados Unidos, que muestra la clara divergencia entre los conservadores de la iglesia y la agenda -liberal- Papal.En noviembre del 2017 se publicó The Dictator Pope (El Papa Dictador), que es la historia interna del papado de Francisco escrita por el historiador H.J.A. Sire, donde hace referencia a las críticas que desde su llegada al Vaticano le han dispensado los conservadores, que se refieren al efecto de las propuestas de Francisco y las repercusiones dentro de la iglesia católica. Y señala que “por lo general los dictadores no son agradables”, al referirse hipotéticamente a la profunda propuesta de cambio que ofrece. Pero a la vez lo dibuja como un hombre que puede lograr sus objetivos. “Es capaz -Francisco- de mostrar esta imagen muy suave, pero la gente sabe que tras bambalinas trabaja con mucha eficacia para atacar a su enemigos”. ¿Usted, qué opina?.
