El ídolo de España conquistó, de nueva cuenta, a Guadalajara. Alejandro Sanz saturó los recintos del Auditorio Telmex la noche de este jueves, en la primera de sus tres presentaciones en nuestra ciudad, donde ofreció un concierto de lujo durante su gira "¿Y ahora qué?", que ha sido un éxito total en México, y que llenó de cantos, gritos desesperados, y hasta lágrimas a sus admiradores tapatíos. Vestido de playera negra, con lentes oscuros, pantalones, tenis blancos y una cadena de oro, la aparición de Sanz en el escenario ocasionó una ovación escandalosa. "Desde cuándo" marcó el punto de partida de la noche, inmediatamente seguida de "Capitán Tapón", "La música no se toca", y "Bésame". El público entero estaba de pie, aplaudiendo, agitando las manos, coreando la característica voz ronca, con tintes flamencos, del español. En "Por bandera", Sanz ondeó la bandera mexicana, para regocijo de todos. "Buenas noches, Guadalajara. Qué gusto verles, muchas gracias por venir", dijo Alejandro Sanz. "Gracias por acompañarnos hoy, la primera de tres noches que vamos a estar aquí. Ya saben que tengo un gusto especial por esta ciudad. Me estuve preparando todo el día, he hecho muchas cosas para poder estar esta noche aquí y cantarles como se merecen, lo pasen bien, lo disfruten, y cualquier reclamación se la guardan para ustedes", bromeó. "Les quiero muchísimo. Gracias por estar esta noche".Alejandro Sanz regresó a Guadalajara luego de dos años para llevar a los tapatíos lo más nuevo de su repertorio, salido de su más reciente material discográfico "¿Y ahora qué?" -en el que tuvo colaboraciones con Shakira y Grupo Frontera-, y también, por supuesto, sus canciones clásicas que contestaron corazones en América Latina y el mundo.El cantante, de 56 años, se dejó querer por el público, en especial por las tapatías, que no desaprovecharon las oportunidades para lanzarle piropos, confesiones de amor y hasta declaraciones ardientes, que Alejandro Sanz recibía con sonrisas y carcajadas incrédulas. Su presentación se destacó por su conjunto musical, conformado casi por mujeres; una bajista, percusionista, coristas, trompetista e incluso baterista.El público estaba conformado por gente de todas las edades, pero principalmente por mujeres, que han sido admiradoras fieles del cantante. "Es un ídolo, creo que tiene una voz bonita y es un gran artista", cuenta Marisol, de 45 años, acompañada de sus dos hijas. "Yo y mis hijas somos fanáticas, es la segunda vez que lo vemos, aquí en Guadalajara lo queremos mucho". Rosa Isela, de 37, junto con su esposo, también compartió su entusiasmo, aunque él parecía más bien resignado. "Me trajeron de a fuerzas", bromeó.Sandra y Paola, de 27 y 26, son fanáticas más recientes de Alejandro Sanz, que comenzaron a seguir la trayectoria del cantante a partir de sus colaboraciones con Shakira y Grupo Frontera. "Es la primera vez que lo vemos, estamos muy emocionadas de que venga aquí a Guadalajara", compartió Sandra. "Me encanta cómo canta, tiene una voz muy peculiar ".Alejandro Sanz es tan querido en Guadalajara, que todavía le quedan dos conciertos más en la ciudad, el sábado 27, y el domingo 28, prácticamente vendidos por completo.La primera noche cerró con broche de oro, como tenía que ser, con "Y si fuera ella", "Lo ves", y "Corazón Partío", que generó una oleada de gritos y coros que se esparció como marejada por los recintos del Telmex. El cantante, sonriente, lanzando adioses y besos al público, se despidió de la Perla Tapatía tan solo de momento, pues todavía le quedan dos fechas repletas para conquistar, de nueva cuenta, a los tapatíos. YC