La fortaleza del peso no para. El mayor optimismo respecto al comercio internacional, la debilidad del dólar a nivel internacional y un alza en los precios del petróleo fueron los principales factores que dieron impulso ayer a la moneda mexicana. De acuerdo con datos del Banco de México, el dólar interbancario cerró en 18.4780 unidades, su segundo día por debajo de la barrera clave de los 18.50 y su menor nivel desde el pasado 19 de abril. En tanto, en ventanilla bancaria, el billete verde se vendió en 18.75 unidades, por debajo de la cifra registrada el lunes por Citibanamex. El tipo de cambio presentó un máximo en 18.5208 unidades, mientras que el mínimo se reportó en 18.4050 unidades en el mercado de mayoreo. Con el movimiento de ayer, la moneda mexicana acumuló un avance de 0.74 por ciento en tres días consecutivos. “El peso mexicano ligó tres días ya al alza después de haber roto un nivel técnico clave, al mismo tiempo que el índice dólar cae”, señaló George Lei, estratega de divisas de Bloomberg Intelligence. “La moneda podría extender las ganancias hasta un nivel de 18.00 unidades si es que se las arregla para mantenerse por debajo de 18.50”. El analista añadió que los participantes del mercado cambiario se mostraron optimistas, a la espera de que las negociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte se reinicien en Washington. El índice que mide el comportamiento del dólar con respecto a una canasta de diez divisas bajó 0.18 por ciento, ante la menor demanda que trajo el enfriamiento, por el momento, de las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China. En otro frente, se observó un comportamiento positivo en el mercado petrolero, lo cual favoreció a la moneda mexicana. El precio del crudo tipo West Texas sube 0.23 por ciento a 69.17 dólares por barril, mientras que el tipo Brent aumenta 1.22 por ciento a 74.55 dólares. “La apreciación del peso se debió a un fortalecimiento del precio del petróleo en el mercado de materias primas, luego de que Estados Unidos impusiera sanciones económicas a Irán”, explicó Gabriela Siller, directora de análisis de Banco Base. “Esto se debe a que Irán, que tiene control sobre el estrecho de Ormuz, por donde transita cerca del 30 por ciento del crudo a nivel global, podría intentar frenar el flujo de crudo al resto del mundo, generando presiones al alza sobre los precios de los energéticos”. A nivel local, destacó ayer que en la subasta para renovar el vencimiento de coberturas cambiarias, a un plazo de 63 días, la demanda fue de 390 millones de dólares, la cual superó en 1.95 veces a los 200 millones finalmente colocados. Por ahora, a nivel técnico, el tipo de cambio presenta un soporte en 18 pesos, siempre y cuando se confirme el rompiendo a la baja de las 18.50 unidades. En tanto que la resistencia más cercana se ubica en 18.76 unidades, en el mercado de mayoreo. La previsión el tipo de cambio para el cierre de este año mejoró, de acuerdo con la encuesta quincenal de expectativas económicas levantada por Citibanamex. En el sondeo más reciente, publicado ayer, la previsión para la paridad peso dólar se ubicó en 18.90 unidades para el cierre de 2018, mientras que en la encuesta previa se ubicaba en 19.00 unidades. Esta estimación es menor a la reflejada en el sondeo de 43 analistas realizado por Bloomberg, el cual mantiene una previsión de 19.00 unidades. En este último sondeo, la visión más optimista corresponde a Wells Fargo, al ubicarla en 18.00 pesos por dólar, mientras que la más pesimista, correspondiente a Scotiabank, lo ubica en 20.20 unidades. En la encuesta realizada por el Banco de México de julio, la estimación para el cierre de este año se ubica en 19.11 pesos por dólar. Contagiados del apetito por los activos de riesgo en el mundo, los mercados nacionales pintaron de verde las pizarras por tercera ocasión consecutiva ayer, provocando que el IPC de la Bolsa Mexicana de Valores se acercara a los 50 mil puntos, un nivel que no se ha visto desde hace siete meses. Al final de la sesión, el referente accionario avanzó 1.31 por ciento, más de 640 puntos, que lo llevaron hasta las 49 mil 963.87 unidades. “Anda acercándose a los 50 mil puntos, y el buen desempeño se lo atribuyo a dos factores, a los reportes trimestrales y al rezago que traía el mercado accionario mexicano, lo que ayuda a que se consolide la apreciación apoyada del desenlace electoral y la apreciación del peso”, comentó a El Financiero, Jacobo Eleazar Rodríguez, director de análisis financiero de Black WallStreet Capital. Los movimientos positivos en el IPC fueron impulsados por Grupo Financiero Banorte, que subió 4.67%, seguido de Grupo Carso, América Móvil y Volaris. De acuerdo con una encuesta levantada por Reuters entre nueve grupos financieros, ubican al IPC de la BMV al final del año, en un promedio de 53 mil 311 puntos. Siendo el más optimista el Banorte, que estima finalice el año en 56 mil 900 unidades, y el más pesimista Bank of America Merrill Lynch, que pronostica los 50 mil puntos.
