La tradicional celebración del Grito de Independencia en México, que cada año llena de color, música y antojitos los hogares del país, llegará este 2025 con un sabor amargo: los altos costos derivados de la inflación amenazan con encarecer significativamente las Fiestas Patrias.Este año, preparar la clásica cena mexicana en casa —una opción que suele ser la favorita entre familias por su ambiente íntimo y festivo— podría convertirse en un verdadero reto económico. El aumento en los precios de alimentos clave como la carne de cerdo, los chiles y otros ingredientes de la canasta básica ha disparado los costos de los platillos típicos que acompañan la noche del 15. Según un análisis de la firma Serta, una cena sencilla para cuatro o cinco personas —que incluya pozole, antojitos, bebidas y postres— podría costar entre mil 500 y tres mil pesos, dependiendo de los ingredientes y el lugar de compra. Esto representa un aumento significativo en comparación con años anteriores.Quienes buscan evitar la cocina y prefieren celebrar fuera de casa tampoco estarán exentos del impacto económico. Festejar en un restaurante de gama media podría costar entre 800 y mil 800 por persona, dependiendo del menú y ubicación del lugar.Para aquellos que optan por experiencias más exclusivas, como cenas en hoteles de lujo con espectáculos y barra libre, el precio por persona puede fácilmente superar los $3,000 pesos, e incluso alcanzar cifras mayores a los $10,000 pesos, especialmente en zonas turísticas o establecimientos de renombre.El pozole, los tamales, los chiles en nogada, los pambazos y los buñuelos siguen siendo los protagonistas de la noche del 15 de septiembre. Más allá de su valor culinario, estos platillos representan una celebración de la identidad nacional y de la herencia cultural que se transmite en cada receta.No obstante, este año muchas familias podrían optar por versiones más económicas o por reducir el número de platillos en su mesa para no comprometer su presupuesto.A pesar de las complicaciones económicas, la cena del 15 de septiembre sigue siendo un momento clave para la convivencia familiar y la reafirmación del orgullo mexicano. Sin embargo, todo indica que en 2025 muchas familias buscarán celebrar con moderación, priorizando platillos accesibles y reuniones más íntimas, adaptándose a la realidad económica sin dejar de lado el espíritu festivo. EE