Conscientes de que el público tapatío es conocedor pero exigente, dentro de la ganadería Pozohondo se muestran impacientes y emocionados por presenciar la corrida de hoy en la Nuevo Progreso, cita en donde se lidiarán seis de sus astados.Con el antecedente de que sus toros brindaron una buena tarde en la Feria de Aniversario de 2019, y con cinco generaciones de experiencia en la crianza del toro bravo, Ramiro Alatorre Rivero se encuentra con altas expectativas para presenciar la cartelera de este día, misma en donde figuran los matadores Juan Pablo Sánchez, Luis David Adame y Diego Sánchez.“Para cualquier ganadero el hecho de estar anunciado en Guadalajara ya es un éxito, ya es un logro importante. Sin duda es la plaza más exigente del país, donde mejor se presentan los toros, donde más se exige y donde la afición es conocedora”.“Poco antes de la pandemia tuvimos una corrida que fue un éxito, le dieron vuelta al ruedo a un toro, hubo corte de orejas por Leo Valadez y ahora volvemos a Guadalajara con emoción y compromiso”, comentó.Por su parte Ramiro Alatorre Córdova, padre de Alatorre Rivero, destacó el trabajo y empeño que hay detrás de cada uno de los toros que serán lidiados este día en el coso tapatío.“Quizá la lidia dura 15 minutos, pero el trabajo que hay ahí es desde que el toro nace, cada día y muchas generaciones para atrás. Cada toro tiene su árbol genealógico desde sus orígenes, ocho o diez generaciones atrás y de todo se lleva el control con mucho mimo y cuidado”.
