Mientras el balón ruede, puede acercarse a cualquier portería. Es una primicia del futbol, sin embargo no siempre será empujado por la persona correcta. Los autogoles suelen convertir héroes en villanos, hacen que la desgracia se presente, que la sangre baje hasta los pies y la vergüenza aparezca en todas sus expresiones, tal y como sucedió en la final de la Copa MXfinal de la Copa MX entre Toluca y Necaxa del Clausura 2018. Santiago García intentó despejar e incrustó la pelota en su propia portería, esto cerca del final del juego, lo que le dio el título a los Rayos, y dejó tendidos a los Diablos, que regresaron a casa con las manos vacías.Sin embargo han existido más casos de autogoles que han marcado a los futbolistas a tal grado, de que incluso han pensado en dejar el deporte, por la vergüenza ocasionada, o bien, por miedo a represalias de sus aficionados que podrían "agarrarla" contra ellos. Pero el caso más trágico y sonado de un autogol, ocurrió en el Mundial de 1994, cuando Andrés Escobar tuvo la mala fortuna de anotar en propia portería, al regreso a Colombia, fue asesinado.Ejemplos de autogoles hay muchos, pero cuando se trata de anotaciones en propia portería en momentos decisivos hay pocos, como los que le ocurrieron a jugadores históricos como Stiven Gerrard, Arturo Vidal, Miguel Marín de Cruz Azul, o el brasileño Felipe Melo en el Mundial de Sudáfrica 2010.En la Copa del Mundo de Estados Unidos 1994 terminó en tragedia para el colombiano Andrés Escobar, quien tuvo la mala fortuna de meter el balón en su propia portería enfrentando al país anfitrión. El defensor venció a su arquero Óscar Córdoba y Colombia perdió el partido. Al llegar a su país, Escobar fue asesinado.El partido entre Cruz Azul y Atlante del 23 de mayo de 1976, es recordado por el autogol que hizo el portero celeste, Miguel Marín. El guardameta tenía tal fuerza en los brazos que le permitía despejar como con las piernas y mandar el balón más allá del medio campo. No obstante, en aquel cotejo titubeó, tiempo suficiente para soltar la pelota con dirección a su propia portería.En el último minuto de la semifinal de la Liga de Campeones de la UEFA en el 2008 que enfrentaba a Liverpool y Chelsea, un gol en propia meta del noruego John Arne Riise permitió al Chelsea romper el maleficio de Anfield con un empate a uno en el juego de ida de la Semifinal. Riise intentó despejar de palomita un centro desde la banda izquierda y en cambio envió el balón al fondo de las redes.En la Copa del Mundo de Sudáfrica 2010, Felipe Melo, futbolista de la selección brasileña, hizo un autogol que dejó fuera a su selección de aquella justa, y fue ante Holanda en Cuartos de Final, lo que hizo que muchos le recomendaran no regresar a su país, incluso el propio jugador confesó que pensó en dejar el futbol después de su desastrosa actuación.También los grandes del mundo se equivocan. En la Final de la Carling Cup 2005, el Liverpool tenía el resultado a su favor y se encaminaba a un nuevo título, pero a minutos del final, la defensa de los Reds se equivocó y fue finalmente la figura Steven Gerrard quien acabó metiendo la pelota en su propio arco. El partido se fue al alargue y allí el Chelsea se impuso por 3 a 2.El gol que marcó el comienzo del fin para River. En el Superclásico jugado en la Bombonera en el Clausura 2011 contra Boca Juniors, Juan Pable Carrizo metió la pelota en su propio arco a la salida de un tiro de esquina. Después vino un cabezazo de Palermo para sellar el triunfo Xeneize. River no volvió a ganar más y terminó perdiendo la categoría.Le dicen el "Rey Arturo", pero en las Eliminatorias Sudamericanas rumbo a Rusia 2018, el chileno Arturo Vidal se convirtió en el "Rey de los Autogoles", y es que el futbolista del Bayern Munich hizo un par de autogoles, lo que lo incrustaron en la nada halagadora historia del futbol mundial, al ser el primer jugador en anotar dos autogoles en Eliminatorias de Sudamérica.
