Jueves, 28 de Marzo 2024

Chivas vs. América: El Clásico de Clásicos

El Guadalajara tiene una muy arraigada rivalidad contra el las Águilas, y así nació

Por: El Informador

Los Clásicos entre Guadalajara y América paralizan a todo un país, signo inequívoco de que esta rivalidad es de las más importantes en México. EL INFORMADOR/Archivo

Los Clásicos entre Guadalajara y América paralizan a todo un país, signo inequívoco de que esta rivalidad es de las más importantes en México. EL INFORMADOR/Archivo

El fervor, la lucha por la supremacía, los contrastes culturales y todo el protagonismo que tomaron entrenadores y jugadores de antaño, generaron la gran rivalidad entre Chivas y América, hoy por hoy conocido como el Clásico de Clásicos del balompié azteca.

Y es que se trata ni más ni menos que de los dos equipos más populares de México y los dos máximos ganadores en la historia del balompié azteca: América con 13 títulos y Chivas con 12.

La rivalidad histórica comenzó alrededor del año 1943. Arrancaba la era profesional del futbol mexicano y comenzaban a contar los resultados de manera oficial.

El primer duelo entre Águilas y Chivas fue el 16 de enero de 1944 cuando los rojiblancos se llevaron el triunfo de 3-1; el segundo enfrentamiento se disputó ese mismo año y se vivió una pelea campal; pero fue hasta 1959 cuando la rivalidad trascendió a nivel nacional, y todo a raíz de una declaración.

HISTORIAL

Más de 240 enfrentamientos

Hasta la fecha, incluyendo duelos amistosos, de Liga y juegos internacionales, América y Chivas se han disputado 244 partidos, con saldo favorable para las Águilas de 88 triunfos, por 77 de Chivas y 79 empates.

Sólo una vez se han enfrentado en una Final por el título y el América se coronó campeón venciendo al Rebaño por marcador global de 5-3 en la Temporada 1983-84.

Acción en el Clásico del Apertura 99, que terminó en empate 0-0. EL INFORMADOR/Archivo

Rivalidad cultural

El choque cultural también jugó un factor importante. Comenzaba la rivalidad entre la provincia mexicana y la metrópoli capitalina del país. Había distintas visiones socioculturales. Se marcaban las diferencias socioeconómicas entre aficionados. Tomó impulso mediático la rivalidad de “mexicanos contra extranjeros” y el de “pobres contra ricos”.

Chivas vivía su mejor época, la era del Campeonísimo. América buscaba crear una antagonía y generó una rivalidad ante un cuadro tapatío que, en aquel entonces, era el más ganador de México.

Los partidos trascendían fuera de las canchas. Poco a poco creció como un fenómeno social. Así fue naciendo el Clásico de Clásicos. Los jugadores tomaban protagonismo, pero los aficionados eran parte de él llenando los estadios y hablando sólo de este partido en los días previos.

Después de vencer al Oro, al Atlas y a Chivas, Fernando Marcos, técnico del América, dijo que ganar en Guadalajara era para las Águilas una rutina. ESPECIAL

Palabras candentes

Para la Temporada 1958-1959 el América vino a la Perla Tapatía y se llevó sendos triunfos por marcador de 2-0 ante Oro, Atlas y Chivas. Tras la victoria contra el Rebaño, el entonces técnico de las Águilas, Fernando Marcos (foto), hizo la declaración que causó el revuelo del Clásico de Clásicos.

“América no viene a Guadalajara a ganar, eso es rutina. Nosotros venimos para cambiarle el número de su teléfono de larga distancia. Así es que ya lo saben mis amigos: cada que quieran llamar a Guadalajara marquen dos cero, dos cero, dos cero o el 20-20-20. Cortesía del América”.

Esto caló hondo en el orgullo de las Chivas. Pero la revancha llegó pronto. En la segunda vuelta de aquel torneo, el Rebaño visitó a las Águilas y le aplicó el famoso 2-0 al odiado rival enfilándose así a su tercer título de Liga en la era del Campeonísimo.

La pasión ha sobrepasado el juego hasta volverse un fenómeno social. EL INFORMADOR/Archivo

Crece el encono

Años más tarde los equipos se enfrentaron un par de ocasiones en el duelo por el Campeón de Campeones en 1964 y 1965. Ambos trofeos fueron para los tapatíos, pero en uno de ellos salió expulsado un histórico como Guillermo “Tigre” Sepúlveda, quien se quitó la playera para arrojarla al campo y decirle a los americanistas “con ésta tienen”.

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