Enfrentamiento entre el Ejército y sicarios deja saldo de un muerto

VILLAHERMOSA, TABASCO.- Al menos ocho personas detenidas y un muerto fue el saldo de una balacera suscitada entre militares y un grupo de presuntos secuestradores y sicarios, durante esta madrugada en la colonia Guayabal de esta capital.

El Ejército Mexicano realizó un operativo para aprehender al grupo de presuntos delincuentes que operaba desde hace unos 20 días en una casa mediana de dos plantas ubicada en la calle Golondrina del fraccionamiento El Parque, colonia Guayabal.

Sin embargo, el grupo de presuntos integrantes de sicarios, brazo armado del cártel del Golfo, opuso resistencia con bazucas, lanzagranadas y armas de alto calibre y el enfrentamiento tardó de casi dos horas.

Aunque es una zona densamente poblada, con casas pegadas una junto a la otra, sólo una vivienda, además de la casa de seguridad de los delincuentes, resultó con daños producto de la refriega entre militares y secuestradores.

En el refugio de los delincuentes también fueron decomisados tres vehículos y armamento, que junto con los detenidos, fue trasladado a la 30 zona militar.

Vecinos de la calle Golondrina, aun sin dormir, relataron la noche de "terror" que pasaron. "Fue espantoso. Primero empezó con un bombazo y luego una balacera intermitente. Era una batalla", narró una señora en cuya casa se incrustaron unos seis disparos.

Otros habitantes cercanos a la zona de la balacera, señalaron que sus familias pasaron varias horas tirado pecho tierra en el piso de sus casas, mientras escuchaban el sonido de las granadas, el tableteo de fusiles R-15 y de pistolas.

Las autoridades aún no dan a conocer oficialmente nombre y número de detenidos y muertos.

Nadie de los colonos se imaginaba la actividad que realizaban los ocupantes de la vivienda color rosa sin número de la calle Golondrina, casi esquina con Del Río, unos metros atrás del hotel Luna Azul, ubicado conre la avenida prolongación de Paseo Usumacinta.

"Solo veíamos que dos hombres se mantenían afuera, como que efectuaban guardia", recuerda un vecino, quien señala que esas personas llegaron a residir al lugar desde hace unos 20 días.

Tanto en el interior de la casa de seguridad, como en la calle quedaron regadas los casquillos de los disparos del grupo armado, como de militares, quienes se tuvieron que parapetar techos de viviendas vecinas y alrededores del lugar.