GUADALAJARA, JALISCO (18/JUN/2017).- Gabriela Correa tiene una tienda de abarrotes sobre la calle Hidalgo, que da justo al Parián del Centro de Tlaquepaque. Hace dos semanas dejó a su hermano a cargo del negocio. A las 19:00 horas, una persona ingresó en el negocio, se paró frente al mostrador y sacó una pistola con la que asaltó al dependiente. “Se llevó el puro dinero”, contó.Gabriela aseguró que ante el aumento en los robos violentos y la pasividad de las autoridades para garantizar su seguridad, los vecinos ya cotejan organizar reuniones para aplicar acciones.Esta situación está llevando al hartazgo a los vecinos que ya empezaron a tomar cartas en el asunto, contó un empleado de una tienda de electrónica. “Llegó un tipo y agarró un aparato y se fue corriendo hacia los departamentos del Infonavit, pero allá lo agarraron y lo trajeron para acá. Le pusieron una santa...”. El presunto ladrón fue entregado a las autoridades en calidad de lesionado con múltiples hematomas y chichones.Gabriela dijo que en cuanto se sabe de un robo la Policía pasa dos o tres días y luego todo vuelve a la normalidad, es decir, sólo realiza los patrullajes esporádicos.“Estamos planeando. A mí se me había ocurrido, tengamos o no tengamos negocios, estar alertas, si agarramos a uno lo vamos a linchar, porque si esperamos a que llegue la Policía...”, dijo.“Es que despiden a los policías y contratan chavos que no hacen nada, todos parientes de nuestra primera edil”, presumió el veterinario Leonardo, también afectado por la delincuencia.Los vecinos y comerciantes planean llevar a cabo reuniones para definir su estrategia de combate al crimen, tal vez con mantas donde adviertan que ya no tolerarán sus fechorías.Si bien en este caso los inconformes se juntarán para buscar soluciones a este problema, en otras ocasiones las personas han optado por otro tipo de acciones.Por ejemplo, la golpiza que en abril pasado sufrieron dos mujeres a quienes locatarios del mercado Libertad señalaron de robar.El pasado 6 de junio, este medio de comunicación publicó que aunque en Jalisco no eran comunes manifestaciones de este tipo, recientemente se han difundido agresiones e incluso aparentes linchamientos a presuntos delincuentes.Se buscó una entrevista con el comisario Tlaquepaque, Camilo González, pero hasta el cierre de esta edición no se obtuvo respuesta.Ven menos patrullajeA unos metros del negocio de Gabriela Correa se encuentra una veterinaria. La atiende Leonardo, quien se mostró molesto por el gran número de robos que han ocurrido en la zona. “Nos ha tocado ver y hemos sido víctimas de esta violencia desenfrenada”.A él le desvalijaron su camioneta, que por cierto aún no paga. Según vio en las cámaras de seguridad de su vecino, tres sujetos llegaron cuando oscureció y comenzaron a hacer como que hablaban por teléfono. Entonces uno de ellos de repente se agachó y en segundos se llevó una refacción.Y hace unas semanas atracaron y golpearon al veterinario que lo ayuda. El médico llegó a su auto y sólo sintió un golpe que lo aturdió y lo tiró al suelo: “Y que le tumban su billetera y su celular”. Al parecer, los responsables se transportaban en bicicleta y en moto. Cuando regresó al negocio estaba sangrado y les contó lo ocurrido.Algo similar le ocurrió a su tío de 78 años, quien también recibió una paliza antes de que lo despojaran de su dinero y su teléfono.“Antes pasaban de perdis los ciclopolicías, ahora ya no pasan, como hace unos ocho, nueve meses ya casi no se ven”, lamentó Antonio Barrosa, un dependiente de una tlapalería que también ha percibido el aumento en los robos.LA CIFRA108 denuncias por robos a negocios en Tlaquepaque entre enero y abril de 2017.AUMENTAN LAS DENUNCIAS Comparativo de robos en Tlaquepaque de enero a abril de 2016 y 2017Robo con violencia a negocio Robo con violencia a vehículosRobo con violencia a transeúntesRobo sin violencia a casa habitaciónFuente: Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.