Un mito, uso de hormonas en los pollos de engorda

GUADALAJARA, JALISCO.- Hay estudios fundamentados que han echado por tierra el mito de que a los pollos de engorda se les aplican hormonas. Por lo tanto, en el consumo de este alimento no hay riesgos para la salud humana, derivados de un supuesto suministro de tales sustancias, aseguró el presidente de la Unión de Asociaciones Avícolas de Jalisco (UAAJ), Otilio Valdez Correa.

Ante voces que señalan el presunto empleo de hormonas, el dirigente puntualizó que un reciente estudio especializado expone con toda precisión que el acelerado ciclo de engorda del pollo que supone solamente dos meses, es resultado de cruzas genéticas entre las aves.

En este sentido, hizo mención de que el rápido periodo de crecimiento que se tiene en el pollo, supera con mucho el tiempo que durarían las hormonas en producir sus efectos. También dijo que aplicar hormonas en forma de inyección, sería incosteable por razones prácticas para las granjas avícolas.

Además, indicó que el metabolismo de los pollos no se presta para la asimilación de las hormonas en caso de que éstas se aplican en forma revuelta con los alimentos de las aves, lo que incluye granos, pasta de soya, vitaminas y ciertos minerales que actúan como antioxidantes para con ello lograr una dieta muy nutritiva de los animales, al que también favorece su rápido crecimiento.

Resaltó que estudios de organismos muy serios, como el Instituto Nacional de Nutrición, han avalado plenamente la calidad nutricional del pollo mexicano, por lo que este alimento seguirá como una de las fuentes alimenticias de mayor importancia en la dieta de la población, máxime que su precio se ha mantenido accesible a pesar de las dificultades económicas.

Añadió que para Jalisco, la avicultura especializada en pollo tiene una importancia especial, dado que la entidad tiene una aportación de 8 por ciento del volumen nacional que supone 2.7 millones de toneladas.

EL INFORMADOR/ SALVADOR Y MALDONADO