Surge crisis en el PRI Jalisco

GUADALAJARA, JALISCO.- La estrategia del Comité Estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI) para integrar las planillas de candidatos a regidores fracasó rotundamente. Una manifestación de más de 500 militantes priistas tomó ayer, de las 18:00 a las 22:30 horas, el edificio de la sede estatal del partido, para exigir respeto a la militancia y modificaciones en las listas de candidatos a regidores en la zona metropolitana.

Los candidatos a alcaldes por Guadalajara, Zapopan, Tlaquepaque y Tonalá sostuvieron una reunión hasta poco antes de las 22:00 horas, en la que acordaron rechazar tajantemente las listas de regidores que se habían registrado por la mañana, por orden directa del presidente estatal del partido, Javier Guízar Macías, repudiado por los manifestantes que llegaron de Tlaquepaque, Tonalá y Puerto Vallarta.

La mañana de este jueves, a las 10:00 horas, los cuatro candidatos volverán a reunirse en el edificio sede del PRI Jalisco, para reiterar públicamente su repudio a las listas, en las que figura personajes como Eduardo Almaguer y Javier Galván, en Guadalajara, y Jaime Prieto, junto con Abel Salgado, en Zapopan.

“No pude comunicarme en todo el día con Javier Guízar”, comentó anoche el candidato del PRI a la alcaldía de Zapopan, Héctor Vielma Ordóñez, quien entrevistado por EL INFORMADOR, aseveró: “Al secretario general del partido (José Manuel Carrillo Rubio) le dejé muy claro que por ningún motivo voy a aceptar esa lista de regidores”.

En el mismo tono se pronunciaron también Jorge Aristóteles Sandoval, candidato tricolor por Guadalajara; Antonio Mateos Nuño, candidato para Tonalá, y Miguel Castro Reynoso, el candidato para Tlaquepaque.

Con la manifestación, que reunió más de 500 personas, y la negativa de los candidatos a aceptar las planillas de candidatos a regidores, quedó definitivamente desacreditada la maniobra política del Comité Estatal priista de Javier Guízar, que por días negoció la integración de planillas y que concluyó con un “madruguete” la mañana de este viernes, cuando en el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana, a las 7:30 de la mañana, se presentó el mismo Guízar Macías, en compañía del representante del partido ante el Instituto, José Luis Monterde Ramírez, para hacer el registro de rigor, que venció precisamente a las 24:00 horas de ayer.

Ante la presión de los candidatos y la militancia, queda ahora la posibilidad, aceptada por Monterde Ramírez mismo, de que se obligue a renunciar a varios de los candidatos a regidores, para cambiarlos por otros. “Eso está permitido por el Código Electoral”, admitió el representante priista tras ser consultado. Sin embargo, es posible que los afectados puedan recurrir a los tribunales para hacer valer sus derechos político-electorales, pues al momento de ser registrados, cumplieron con los requisitos estatutarios del PRI. En la ley no se contemplan las componendas políticas.

El escenario de crisis para el PRI está completamente plantado. Javier Guízar pretendió “dar espacio a los diferentes sectores, construir la unidad”, según expresó José Luis Monterde, “se construyeron planillas plurales, representativas”, pero en contra, la toma del PRI Jalisco reflejó, conforme dijo el regidor priista de Tlaquepaque, Elías Navarro, “un abuso de la militancia, una traición, porque nos dijeron que respetarían los acuerdos, y con el madruguete del registro de planillas, resultó que pusieron gente que, en el caso de Tlaquepaque, ni siquiera es conocida por la miltancia. ¡Eso no es de hombres y no se vale!”.

En la toma de las instalaciones participaron también Jorge Arana Arana y David Hernández, candidatos a diputados federales, quienes presenciaron cómo la gente llegada a respaldar los reclamos vociferó contra Javier Guízar y pidió su salida del partido.