La trama educativa

El gran poeta argentino Jorge Luis Borges, planteaba el dilema del origen con los últimos versos del  poema Ajedrez: “Dios mueve al jugador, y éste, la pieza. / ¿Qué Dios detrás de Dios la trama empieza?..”. Mucho más vulgares y nada poéticos, cuando a la salida de la secundaria nos subíamos al camión simplemente gritábamos “¡el de atrás paga!”, y nos desentendíamos del costo del boleto. En la bola, el camionero lo único que podía hacer eran rabietas. Algo similar sucede en el sistema educativo. El tema de fondo es dónde comienza la trama del desastre. Qué pasa, que los resultados de las evaluaciones son tan bajos. Elba Esther mueve al sindicato y éste a su vez, mueve sus piezas... Pero asumir simplemente, como lo comentaron algunos funcionarios de la Universidad de Guadalajara (UdeG), que la baja calidad de la educación preparatoria es porque los alumnos que les mandan vienen muy mal de la secundaria, es gritar “¡el de atrás paga!” y desentenderse del problema.

Efectivamente, la educación secundaria es muy mala y la primaria no se queda atrás. Tenemos un problema gravísimo de calidad educativa que tiene que ver fundamentalmente con un esquema burocrático y con el secuestro de la educación por parte de un sindicato muy poderoso. Hay maestros extraordinarios que son excelentes educadores, pero son tal cual, los que van más allá de lo ordinario; no es lo común. La primaria es mala, la secundaria es mala y entonces hay que asumir que la prepa debe serlo también. De licenciaturas, maestrías y doctorados mejor ni hablemos.

El problema de las preparatorias de la Universidad de Guadalajara va más allá de la mala educación de la secundarias. Tradicionalmente, la Universidad ha usado las prepas para dos cosas: hacer promedios de subsidio por alumno que les sean ventajosos, y para sacar alumnos a la calle cuando hay que pedir presupuesto. En el día a día de las aulas hay un abandono presupuestal e institucional, y esto último es todavía más grave.

Contrario a lo que se pudiera esperar, las prepas de mayor presupuesto por alumno no son las mejores, no hay una relación directa entre presupuesto por alumno y calidad educativa. Los factores de la mala educación preparatoria no están ligados solamente a la calidad de las secundarias y a la falta de dinero, pues los resultados demuestran que estos mismos factores son digeridos de manera distinta en diferentes preparatorias. La Universidad de Guadalajara, y la educación en general, requieren sin duda mayor presupuesto, pero los contribuyentes tenemos derecho a una rendición de cuentas que vaya más allá de numeritos publicados en internet.

En la UdeG el dinero es un problema, pero el problema de la UdeG no se resuelve con dinero.