Erigen vivienda vertical en Tetlán

- Crece bolsa de créditos de vivienda del Infonavit

GUADALAJARA, JALISCO (21/ENE/2011).- Como resultado del rescate de baldíos y predios abandonados, este año se podrá contar con vivienda de interés social dentro de la Zona Metropolitana de Guadalajara, específicamente en la zona de Tetlán, sobre la calle Javier Mina y la Avenida Belisario Domínguez; será vivienda vertical.

Al presentar el informe del año 2010 y las expectativas para 2011, el delegado en Jalisco del Instituto del Fondo Nacional para la Vivienda de los Trabajadores (Infonavit), Antonio González Morfín, destaca el avance en materia de construcción de casas-habitación en la ciudad, donde existe un fuerte rezago.

Explica que, al carecer de vivienda la ciudad, los trabajadores que contaron con su crédito el año pasado debieron desplazarse a municipios conurbados como Tlajomulco e Ixtlahuacán de los Membrillos. Esto derivó en que al vivir lejos de los centros de trabajo, optaron por dejar la vivienda, lo que disparó el fenómeno de casas abandonadas.

“En la primera mitad de este año vamos a empezar a ver caminar los primeros proyectos de vivienda vertical en la parte consolidada de Guadalajara. La pretensión es (edificar) a lo largo de cinco, seis corredores de movilidad: Federalismo, Calzada Independencia, Belisario Domínguez, Javier Mina.

Corriéndose cuatro o cinco cuadras a los lados de esos corredores hay terrenos, baldíos de fincas cayéndose, de viviendas abandonadas en lugares que tienen todos los servicios y esos serían los terrenos a aprovechar”. El costo de las casas oscilará entre 300 mil  y 600 mil pesos.

Existe alta demanda de vivienda cercana a los centros de trabajo que no está cubierta. Basta observar las cifras: el año anterior, 145 mil trabajadores que cumplen con los puntos para solicitar un financiamiento viven en la capital tapatía y solamente mil 500 compraron vivienda en el municipio.

El pasado martes, el Ayuntamiento de Guadalajara presentó un programa de incentivos fiscales para la captación de inversiones inmobiliarias que permita incrementar la oferta de vivienda en el municipio, para así revertir la tendencia de despoblamiento registrada desde 1990.

A partir de este año, todos los impuestos y derechos municipales que debe cubrir un desarrollador (licencia de urbanización, supervisión de la obra, licencia de construcción, alineamiento y número oficial, entre otros) tendrán una reducción de 50%, si son proyectos con al menos 30 unidades de vivienda.