Aplican estrategia para acortar el plazo de citas en el IMSS

GUADALAJARA, JALISCO (17/DIC/2015).- Roberto Gutiérrez acudió puntualmente a cada una de las citas que se le agendaron en función de los tiempos del doctor, pero su familia denuncia que no recibió una atención oportuna y murió hace un año. Fue sólo uno de los más de 20 casos que, en promedio, reciben a diario los médicos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Jalisco.

Marcelo Castillero Manzano, delegado del Instituto, explica que tiene más de dos mil doctores trabajando en Jalisco. Cada uno debería atender hasta tres mil personas por año (derechohabientes y familiares), pero hay casos en los que están a cargo de seis mil.

No es excusa. Por el contrario, están conscientes de la realidad que enfrentan sus pacientes: hay “un gran problema” en la atención de segundo nivel (especialidades), principalmente.

“Allí es donde son más las quejas, como ‘tengo dos meses o tres y no me citan’”.

En otra arista, la cifra de derechohabientes también es superior a la de 2014: suman 1.4 millones de trabajadores integrados al sistema de seguridad social, sin contar a sus familiares con derecho a recibir atención.

En total, cerca de cuatro millones de derechohabientes en Jalisco (60% del total de la población) reciben atención en 110 clínicas de medicina familiar, 17 hospitales de segundo nivel y tres de alta especialidad. Esa es la razón por la que el servicio médico del IMSS responde a citas que pueden demorar hasta tres meses.

Explica que, para atender las demandas y ayudar a despresurizar el sistema de salud, en este sexenio se han aplicado varias estrategias. A nivel medio (clínicas de especialidad) se ha detectado que puede haber descoordinación entre el personal. Y para evitar eso se han emprendido programas piloto en clínicas como la 14.

“Nos dimos cuenta que había mucha lentitud, a veces, entre el propio personal. Entonces en la Clínica 14 nos dimos a la tarea de un proyecto piloto con sus unidades (de medicina familiar) 78, 93, 5, 52 y 54. Ese es el hospital en donde había más diferimiento entre consultas”.

A partir de que se centró atención en ese núcleo médico, se han aplicado más de dos mil consultas con tiempos de espera máximos de 35 minutos, y citas con un lapso de espera menor al mes. “Y así lo queremos hacer en todos los hospitales. Nos ha dado muy buenos resultados (…) Ese hospital tenía diferimiento largo para atención especializada. Ahora en 25 días, máximo, estamos dándole cita al paciente que requiere”.

—¿De qué depende que la estrategia se replique en todas las clínicas del Estado?

—Despresurizar el sistema de salud requiere de fondos (económicos). Por cada 10 pesos presupuestados (en el IMSS), cinco se van al pago de pensiones para los más de 250 mil trabajadores en esa condición. El resto se reparte entre la nómina y la compra de equipo médico.

Añade que el plan de crecimiento, acompañado de otras medidas, como las jornadas quirúrgicas (que son “maratones” de intervenciones médicas de especialización) para optimizar los tiempos de atención a pacientes, está proyectado para lo que resta de la administración.

NUMERALIA

Sistema rebasado

Delegación Jalisco

1.4 millones	110	2 mil	45 mil	21 mil millones
de personas cotizantes en el IMSS hay en Jalisco. Con sus familiares, el Instituto debe atender las enfermedades de hasta cuatro millones de jaliscienses.	clínicas de medicina familiar, 17 hospitales de segundo nivel y tres de alta especialidad es la infraestructura disponible.	médicos es la plantilla en la Delegación.	consultas y 65 mil recetas se entregan a diario en el Estado.	de pesos es el presupuesto anual: la mitad se va para el pago de pensiones y, el resto, se destina al pago de nóminas y compra de equipo médico.

LAS CIFRAS

Hospitales Civiles

77 mil	egresos hospitalarios cada año.
650 mil	consultas a niños y adultos.
37,500 mil	cirugías.
13,500 mil	nacimientos
1,709	camas.
206	consultorios especializados.
65	quirófanos

Los programas en acción

Para reducir la presión en las clínicas de medicina familiar se han emprendido diversas estrategias:

• Unifila para pacientes espontáneos. Tienen un lugar específico para hacer fila y recibir atención médica (se aplica sólo en la Clínica 92 de Miravalle, por el momento).
• Respetar horarios. La agenda se hace respetar conforme al horario en que se registró el paciente.
• Construir nuevos núcleos médicos. La intención es atender a las personas en los polos que se han desarrollado en los últimos años, como el Norte de Zapopan, Tonalá y Tlajomulco.
• Consulta sabatina. Se aplica en algunos hospitales para ayudar a que los trabajadores acudan a sus citas en días no hábiles.
• Receta resurtible. Especialmente para personas con enfermedades crónicas, como la diabetes. Reciben tres recetas para que su cita con el médico sea tres meses después.
• IMSS Digital. Aplicación para celulares inteligentes en la que el usuario puede confirmar su vigencia de derechos y, si lo desea, incluso cambiar de clínica.

TESTIMONIO

Mejor gasta en médico privado

Su tarjetón luce abarrotado de números escritos con tinta azul y negra. Son las citas agendadas en las Clínicas 39 y 180 del Seguro Social, a las que ya de plano decidió avanzar de manera paralela comenzando tratamiento con un cardiólogo particular.

Así, Estela López Padilla prefiere gastar mil pesos quincenales en medicamentos para controlar su presión elevada, mientras espera a que llegue febrero y entonces la vea un internista del IMSS, para que sea quien decida si es apta o no para que la revise un cardiólogo.

El temblor de sus manos es la primera evidencia de que su presión arterial está muy por encima de lo normal. Pero ninguna prueba fue suficiente para que, en octubre de 2014, el internista decidiera mantenerla bajo revisión. La dio de alta.

“Voy y le platico eso a la doctora familiar y me dice: ‘Señora… eso no es normal. Le va a dar un infarto… o va a perder algún riñón”.

Doña Estela, de 63 años, se reconoce con gracia como “un estuchito de monerías”. Además de los problemas de presión arterial padece por “tumores subcutáneos” que también desea atender en el IMSS, pero hasta el próximo año.

Dentro de las paredes de su clínica ha sumado mucho estrés a su padecer. Hace dos años, una de las secretarias perdió sus papeles. ¿Qué consecuencia hubo? Esperó tres meses más, en tanto se resolvía el trámite administrativo. Mientras se aguantó; no había alternativa.

Por lo pronto, Estela está bajo control y eso es lo que le importa. No sabe si continuará asistiendo a sus citas por lo que ve a su elevada presión, aunque le serviría mucho reducir el gasto quincenal que hace en sus medicamentos.

Es la alternativa que tienen los pacientes para recibir una atención oportuna: combatir el sistema público y privado, pero no todos tienen esa opción económica.

REALIZAN CASI DOS MIL 500 CONSULTAS DIARIAS

Los temas administrativos afectan servicio en Civiles

En los Hospitales Civiles de Guadalajara hay interés de atender a los ciudadanos con tiempo, sin demoras y, sobre todo, darlos de alta lo antes posible.

Sin embargo, esto no sucede por los problemas con el Seguro Popular. Desde que este programa federal incluyó al Hospital Civil en la cobertura del servicio, la cantidad de usuarios ha incrementado sustancialmente en las instalaciones.
 
Beatriz Gutiérrez Moreno, gerente de calidad en el Nuevo Hospital Civil de Guadalajara, expone que muchas de las demoras se deben a temas administrativos.

Dado que hay intervenciones que el Seguro Popular no abarca en su totalidad, los familiares de los pacientes deben pagar una cuota mínima de recuperación para esos casos. Si la familia del paciente afirma que no le es posible pagar, las áreas de Trabajo Social realizan un estudio socioeconómico para verificarlo. Si es procedente, la cantidad puede reducir o ser condonada.

Pero en tanto ese estudio se realiza habrá un paciente que puede ser dado de alta. Y por ende, habrá otro esperando que esa cama se desocupe.

El promedio de estancia en los Civiles es de seis a siete días, aunque hay casos en los que se ha disparado hasta 20 por esas trabas administrativas.

Jaime Raúl Parra Estrada, asesor de la Gerencia de Calidad en el Viejo Hospital Civil, expone que las problemáticas son muy similares. No obstante, la meta es prestar los servicios de salud y “hacerlo bien”.

A los temas administrativos se suman otros, como el hecho de que algunos familiares “abandonan” a los pacientes y porque existe “preocupación” en la cifra de insumos con los que se cuenta actualmente, pues ya comienzan a faltar algunos en ciertas áreas.

No obstante, los censos que se levantan revelan un nivel de satisfacción de 65% en 2014, contra un 3% de “mucha insatisfacción”.

Eso, pese a que casi la mitad de los consultados ventiló que esperaron entre una hora y media y hasta más de tres horas para entrar a su consulta.

Por lo que ve a las citas de consultas en especialidad, 42% de los pacientes concluyó en que ésta se les dio entre 31 y 90 días, y 35% la obtuvo en menos de un mes.

TESTIMONIO

“Campamento” de 15 días…

José Luis Rosales tiene todo preparado para que su estancia en la calle sea menos complicada: encontró un lugar acogedor en una esquina y allí tendió sus cobertores. Colocó sus botes de agua, sus paquetes de papel higiénico y las almohadas que le ayudarán a hacer menos duras las noches de diciembre. Tiene pensado permanecer al menos 15 días… justo afuera del Hospital Civil.

Su madre, Juana Juárez, de 72 años, espera en el interior. Es la tercera vez que la operan. Las mallas que le colocan en el abdomen para ayudar a cicatrizar la primera intervención, en la que le extrajeron un tumor de seis kilos, insisten en vencerse.

Por eso conoce el protocolo. “Ya tengo experiencia. Con esta ya son tres operaciones; ya sabe uno a lo que viene”.

No sólo es él quien monta guardia. Le acompañan su hermana y su padre, pero en la mañana del pasado 11 de diciembre la primera estaba adentro del edificio aprovechando los minutos de visita, y el segundo se dirigió a desayunar.

¿Y cómo pasaron la noche? “Pues con una cobija abajo y otra tapados. El frío estuvo sabroso. Bien duro”.

La familia dejó de trabajar en el tianguis de San Martín de las Flores para estar lo más cerca de Juana. Y aguantar la jornada, porque en la opinión de José Luis, aunque el servicio que se ofrece en el Hospital Civil es “bueno”, se requiere paciencia y alto criterio para permanecer sin perder los estribos.

“Ellos ya tienen un control”, remata. “Hay gente a la que ya citaron aquí, viene y se desespera. Pero uno ya sabe a lo que viene… hay a lo mejor otras dos gentes que están delante de ti, y pues hay que esperar tu turno”.

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