'Selfie' de mono, sin derechos de autor

CIUDAD DE MÉXICO (22/AGO/2014).- La justicia de los Estados Unidos determinó la ausencia de derechos de autor en la polémica “selfie” del macaco crestado negro realizada con la cámara de un fotógrafo inglés, que posteriormente estuvo exhibida en Wikimedia Commons.

La oficina realizó un compendio de los casos susceptibles a ser registrados en un documento de mil 222 páginas. En él se dictamina que el fotógrafo David Slater no podrá reclamar como propia una fotografía tomada por un animal, y que a su vez, no es posible darle el derecho de autor al mono.

A principios de Agosto, Slater pidió a Wikimedia, eliminara una fotografía de un macaco crestado negro, ya que manifestaba que aunque era un autorretrato tomado por el propio mono, él fue el responsable de que la fotografía se tomara y publicase.

El fotógrafo estaba en un viaje en Indonesia en 2011 tratando de fotografiar al animal en su entorno, cuando el macaco decidió jugar con su cámara. Como resultado, se obtuvo una serie de imágenes curiosas. Slater decidió entonces publicar un par de ellas.

La “selfie” se hizo viral y Wikimedia decidió incluirla en su banco de imágenes. Por este motivo en 2012 el fotógrafo pidió la retirada y Wikimedia accedió, aunque posteriormente se publicó nuevamente por un usuario, quien mencionó que la ley estadounidense no reconoce el derecho de autor a animales.

Este año Slater volvió a reclamar a Wikimedia, puesto que no cedió la imagen para el dominio público y por lo tanto, debía recibir regalías por la misma. Wikimedia señaló que el público era el propietario de la fotografía.

Por su parte la Oficina de derechos de autor de Estados Unidos, ha dictaminado que "la fotografía tomada por un mono" no tiene protección de la propiedad intelectual y por lo tanto no puede ser registrada. "La Oficina no registrará trabajos producidos por la naturaleza, los animales o las plantas. Del mismo modo, la Oficina no puede registrar una obra supuestamente creada por los seres divinos o sobrenaturales", se puede leer en el documento.

Slater todavía puede tratar de registrar la fotografía bajo la ley británica, ya que puede reclamar su propiedad intelectual.