Mónica Noguera reconstruye su carrera

GUADALAJARA, JALISCO (12/JUN/2010).- Hay dos Mónicas Noguera. Una camina libre por la vida, centrada en sus proyectos, es discreta y gusta de hablar sobre sus proyectos profesionales. De sonrisa fácil y corazón sensible, no permite que los pies se le “despeguen” del suelo y se toma los cumplidos con calma.

La otra Mónica Noguera es la que habita en las “revistas del corazón”, donde reina el amarillismo. Huye de los paparazzi, es altanera, no le gusta hablar de su vida privada y sobre ella se inventan cientos de relaciones sentimentales.

Lo cierto es que la Mónica Noguera que visitó recientemente Guadalajara se parece más a la primera que a la segunda. Se sabe en el ojo del huracán, pero parece no importarle demasiado, pues dice que sabe que el “paquete completo” de lo que es la fama viene con ciertos “detallitos”, como lo es ser el blanco preferido de varios rumores.

Equilibrio profesional
Desde hace varios años que Mónica decidió dejar la televisión para dedicarse a otras cosas. El comienzo de su carrera se dio en el canal de cable Telehit durante la década de los años noventa, donde se convirtió en un icono para los jóvenes gracias a la conducción de programas como Top 25 y Espacio alternativo.

Desde allí dio el salto a la señal abierta, donde condujo el programa musical Al fin de semana. Esa etapa de su vida estuvo marcada por su matrimonio con el productor Memo del Bosque, pero una vez disuelta la relación, Noguera comenzó a experimentar en distintos nichos laborales.

Las revistas han sido una fuente importante. En los últimos años, y aprovechando su belleza, ha engalanado las portadas de varias revistas dirigidas al público masculino, aunque advierte que jamás caerá en lo grotesco.

Otra faceta que se le ha dado bien ha sido la conducción. Apenas la semana pasada estuvo en Guadalajara como la conductora del evento Jalisco Moda Nextel, celebrado en el Instituto Cultural Cabañas, donde compartió escenario con el cantante Jan.

“Guadalajara es una ciudad hermosa, y me siento afortunada de que me hayan invitado a conducir este evento, y más dentro de un recinto tan bello como lo es el Instituto Cabañas”, afirmó durante el evento la conductora ojiverde, quien se deshizo en halagos para la Perla Tapatía, “cuna del sentimiento mexicano” que tanto extraña, pues en los últimos años Noguera ha vivido en Miami, trabajando en proyectos para la cadena Telemundo, como Descontrol, Camino a la corona, Las diez más pegadas y El tazón latino de la NFL.

Sortea los escándalos
Sólo un asunto le hizo sombra a Mónica durante su visita a Guadalajara, la separación de su esposo, el productor de televisión Laurens Drillich. “Las razones las sabemos él y yo, pero quiero aclarar una cosa -afirma la conductora- y es que lo quiero mucho, es una persona muy importante para mí y eso no va a cambiar. Aclaro de una vez que el divorcio no se ha concretado”.

Mónica Noguera reconoció que la distancia sí lastimó la relación, pues ella se debía ir a radicar a Holanda por largos periodos de tiempo y luego él tenía que ir a Miami. “Fue un ritmo de vida muy loco y desgastante. Creo que tanto viaje influyó en el desgaste de la relación”.

Con su matrimonio tambaleándose, no tardaron en aparecer los pretendientes, incluso algunos “inventados” por la prensa sensacionalista, el más destacado, Mario Domm (vocalista de Camila). “Me dio risa que me relacionaran con Mario porque somos amigos desde hace muchos años. Todo fue un juego para un programa de televisión, y sólo me extraña que la gente ahora le esté dando tanta importancia. Ahora estoy concentrada en mi carrera, nada más”.

Algo de razón tiene Mónica Noguera en concentrarse en lo positivo. Tras su paso por Guadalajara, la conductora se tomó unos breves días de descanso en Puerto Escondido, Oaxaca, al lado de su hermana Alejandra, que está embarazada. Y de los rumores, ni se preocupa.

Navega: www.twitter.com/monanoguera