SUV aceleran su paso en México

CIUDAD DE MÉXICO.-El alto precio de las gasolinas en Estados Unidos modificó las tendencias de ventas de automotores en ese país. La colocación de vehículos nuevos cayó 10.7% durante mayo. Además, pasó algo significativo en ese mercado: por primera vez, desde 1991, la camioneta Ford F-150 cedió el primer lugar de ventas a un vehículo que está en el segmento de compactos: el Honda Civic.

Esto probó a las automotrices que los consumidores estadounidenses no están a la espera de cómo se comportará el precio de la gasolina. Ellos ya reaccionaron debido a que el incremento sí lo perciben de forma directa en sus bolsillos y empezaron a cambiar camionetas por autos más pequeños.

En México no sucede lo mismo, debido a que los precios de la gasolina son controlados por el subsidio que existe a la compra del combustible, y sólo existe una política de aumento gradual en el año.

Mientras que en Estados Unidos las ventas de camionetas y vehículos utilitarios bajaron, en México los segmentos de lujo y camiones ligeros incrementaron sus ventas 4.3% y 5.4%, de forma respectiva.

“El subsidio a la gasolina está beneficiando a los autos de mayores consumos y por eso no vemos que se comporta la demanda como en Estados Unidos”, explicó José Gómez-Báez, presidente de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA).

Por el contrario, la venta de autos de menor consumo de gasolina, como los subcompactos, cayeron 2.5%.

“El factor que hace que se vendan pocos autos con motores que usan menos combustibles es la entrada indiscriminada de autos usados por la frontera norte”, observó por su parte Guillermo Rosales, director de enlace legislativo de la AMDA, en entrevista.

Las firmas automotrices estadounidenses están reaccionando empujados por una urgente reestructura financiera para ganar la competencia que significan las marcas japonesas.

Desde la edición 2007 del Auto-show de Detroit, los presidentes de General Motors, Chrysler y Ford incluyeron en sus discursos el cambio en las tendencias de consumo, aunque la justificación más socorrida fue la conciencia ecológica mas no un anticipado incremento en el precio de los combustibles como sucede ahora.

Lo que ya es perceptible es cómo las armadoras replantean sus estrategias para afrontar el futuro. Los últimos anuncios de inversión para México son tendientes a la fabricación de autos compactos.

Reportes de la industria coinciden en afirmar que se vive el mayor cambio en el comportamiento del consumidor de autos en EU.

Estos nuevos aires propiciaron el cambio de estrategia en las firmas estadounidenses, que abandonarán la producción de vehículos grandes para concentrarse en autos más pequeños.
El más reciente ejemplo es de Ford de México, que fabricará el Ford Fiesta para 2010 y dejará de fabricar en la planta de Cuautitlán la línea de camiones ligeros.