Piden desgravar al consumo

CIUDAD DE MÉXICO. Una reducción sobre los impuestos al consumo es una medida adicional que el Gobierno federal puede tomar para enfrentar la desaceleración económica, coinciden especialistas.

Este viernes el Banco de México recortó las tasas de interés en 50 puntos base para estimular la economía.

Sin embargo, investigadores estadounidenses se inclinaron por la política fiscal como una medida que puede estimular la economía. “En el contexto de la economía actual, se requiere algo que sea rápido y efectivo, y que cree trabajo ahora, y para hacerlo hay que considerar cortar los impuestos para gente de bajos y medianos ingresos”, afirmó Ben Carliner, director de investigación del Instituto de Estrategia Económica, en Washington (ESI, por sus siglas en inglés).

Para que esta medida genere resultados necesita reflejarse en mayor consumo de productos mexicanos. Por esa razón Carliner dejó fuera el ajuste fiscal en favor de la clase alta, pues este sector de la población, dijo, ahorra sus ingresos adicionales o adquiere bienes extranjeros de lujo. Para no generar inflación, el recorte de impuestos al consumo debe ser temporal, acotó el investigador del ESI. Otra ventaja de una revisión sobre estos impuestos es el apoyo a proyectos de infraestructura, que por su naturaleza tienen un alcance de largo plazo para la productividad, dijo Carliner.

Para el periodo 2007-2012 el Programa Nacional de Infraestructura en México abarca un presupuesto superior a siete mil millones de dólares anuales para la red de transporte. No obstante, el investigador del ESI precisó que los proyectos de infraestructura no siempre generan los efectos esperados sobre la economía. “Algunas veces, por la naturaleza de la política se obtienen proyectos de infraestructura que no están muy bien planeados, con el objeto de llevar votos para los políticos”.

Thomas Cooley, profesor de Economía de la Universidad de Nueva York, consideró los efectos de largo plazo a partir de un ajuste fiscal. “En México el recorte de impuestos podría ayudar, pero tiene otras consecuencias también para el balance fiscal en el largo plazo”, advirtió.

El riesgo, alertó Cooley, es que se produzca un shock fiscal.
A diferencia de Carliner, el especialista de la Universidad de Nueva York sugirió aplicar el recorte fiscal a toda la población por igual.

En otro sentido, Cooley afirmó que “la política monetaria es probable que sea más efectiva para México”, por lo que destacó que la medida del Banco de México sobre las tasas de interés debe favorecer la apreciación del peso frente al dólar.

La semana pasada el dólar llegó a cotizarse en 14.50 pesos.
La crisis de los mercados financieros se originó por fallas en políticas macroeconómicas de muchos países, recordó Edwin Truman, especialista en mercados financieros del Instituto Peterson para Economía Internacional. Por ello, destacó que como miembro del G-20 México tiene la responsabilidad de ofrecer propuestas para frenar la desaceleración internacional.