Es inagurado en Asia el 'gasducto del siglo'

MOSCÚ, RUSIA.- Los presidentes de China, Hu Jintao, y Kazajistán, Nursultán Nazarbáyev, inauguraron hoy el tramo kazajo del conocido ya como "gasoducto del siglo" que transportará gas centroasiático hasta la costa pacífica china.

La ceremonia de apertura del grifo del ramal kazajo, que tendrá dos conductos paralelos de 650 kilómetros cada uno, se celebró hoy en el sur de ese país bañado por el de Marzo Caspio, según informaron las agencias rusas.

Hu, que llegó hoy en visita de trabajo a este país, y Nazarbáyev participaron en el acto a través de una vídeo conferencia desde la sede de la corporación KazMunaiGaz, el gigante energético kazajo.

Ambos mandatarios apretaron simultáneamente el botón que dio inicio al bombeo del gas que circulará por Turkmenistán, Uzbekistán, Kazajistán y el gigante asiático hasta la región occidental china de Xinjiang y de ahí a la ciudad oriental de Shanghai y la región suroriental de Guangdong (Cantón) , vecina de Hong Kong.

"Ha comenzado una nueva etapa de cooperación entre Kazajistán y China. Este es un proyecto grandioso. Con la inauguración de la tubería se recupera la antigua 'Ruta de la seda'" , señaló Nazarbáyev.

Ambos dirigentes, al igual que los líderes turkmeno, Gurbangulí Berdimujammédov, y uzbeko, Islam Karímov, ya confirmaron que asistirán el lunes en Turkmenistán a la inauguración del "gasoducto del siglo" .

Este conducto, cuyo coste está estimado en 20 mil millones de dólares, transcurrirá 200 kilómetros por territorio turkmeno, 550 por suelo uzbeko, mil 304.5 por Kazazistán y unos 8 mil kilómetros por China.

El gasoducto trasegará en un principio 4 mil 500 millones de metros cúbicos de gas anuales y no alcanzará su pleno rendimiento, 40 mil millones de metros cúbicos al año, hasta 2013.

Del total, 30 mil millones de metros cúbicos de gas serán exportados a China y 10 mil millones se destinarán a satisfacer las necesidades de los países de tránsito.

La construcción del gasoducto comenzó en julio de 2007 en la región turkmena de Bagtyarlyk, que cuenta con varios yacimientos con una reservas estimadas por expertos chinos en más de un billón de metros cúbicos de gas.

Las autoridades chinas consideran que el aumento del consumo de gas natural permitirá reducir el uso de minerales y energías contaminantes, como el carbón, que además se cobra la vida de miles de personas todos los años.

China, uno de los mayores importadores mundiales de petróleo y gas, considera a Asia Central como la perfecta alternativa a la inestable región de Oriente Medio, de la que recibe más de la mitad de sus necesidades energéticas.