Defienden que Grecia permanezca en el euro y evite quiebra

BRUSELAS, BÉLGICA (16/FEB/2012).- La patronal europea BusinessEurope insistió hoy en la necesidad de que Grecia permanezca en el euro y evite a toda costa una quiebra, dadas las "fuertes consecuencias" que tendría una suspensión de pagos para las demás economías.

El director general de la patronal, Philippe de Buck, afirmó que los empresarios del continente defienden "enérgicamente" políticas que fortalezcan el euro y la eurozona en su conjunto, pues "no pueden venirse abajo", y por eso hay que hacer "todos los esfuerzos" posibles para salvaguardar la moneda común.

De Buck pidió a la eurozona que finalice cuanto antes sus negociaciones con Grecia para aprobar el segundo rescate de 130 mil millones de euros, pero también insistió en que Atenas cumpla con su parte del acuerdo y aplique los recortes y las reformas consensuadas con la troika (Comisión Europea, Fondo Monetario Internacional y Banco Central Europeo).

Grecia "no puede abandonar el euro y no puede suspender pagos porque eso tendría fuertes consecuencias", indicó.

La patronal, que celebró hoy su reunión ejecutiva en presencia de los representantes de 41 patronales empresariales y federaciones industriales procedentes de 35 países, entre ellos el secretario general de la española CEOE, José María Lacasa, defendió que "los griegos están haciendo muchos sacrificios, pero no pueden ser sacrificados".

De acuerdo con De Buck, la comunidad empresarial en Grecia apoya las medidas acordadas con la troika, muchas de las cuales cuentan con el rechazo frontal de la sociedad, como la reducción del salario mínimo, pero pide igualmente al Gobierno de coalición que las ejecute para que el país vuelva a ser competitivo y a crear empleo.

En general, BusinessEurope considera que el año 2012 será un ejercicio "muy complicado", por lo que habrá que tomar "medidas difíciles" para sembrar las semillas que luego permitan recoger los frutos, señaló el director general de la patronal europea, quien sostuvo: "estamos en un punto de no retorno".

De Buck pidió a los líderes europeos que apliquen las medidas acordadas en la cumbre de enero para generar crecimiento y empleo, facilitar el acceso a capital a las pymes y completar el Mercado Único, e instó a no impulsar regulaciones demasiado complicadas que pueden restringir el acceso al crédito.

"No estoy en contra de normas como las pruebas de resistencia o requisitos de capital, pero tenemos que procurar mantener un equilibrio sano porque si no tenemos como resultado una banca fuerte y un sector de servicios e industrial muy débil", dijo.

De Buck explicó que los empresarios españoles "son más optimistas y bastante confiados" en que las reformas del Gobierno tendrán un efecto positivo en la economía, adelantó, si bien no quiso entrar a valorar la reforma laboral.