El plan prevé "inyectar competitividad a uno de los sectores estratégicos de la economía española, que representa el 6% del Producto Interno Bruto", dijo la vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega.El paquete, explicó, incluye ayudas a los grandes fabricantes para la producción de vehículos eléctricos híbridos, líneas de crédito para la compra de coches y mejoras en la logística y el transporte.De la Vega aseguró que las medidas pretenden fundamentalmente que los trabajadores del sector conserven su puesto de trabajo.Unas 350 mil personas trabajan de forma directa en el sector del automóvil en España. Sin embargo, en los últimos meses, las principales compañías como Ford, General Motors y SEAT, del grupo Volkswagen, anunciaron recortes laborales y de producción.La industria de la automoción genera un 20% de las exportaciones españolas.Además, la venta de turismos en el país europeo cayó un 28% el año pasado, el peor dato desde que se conservan registros.El plan de ayuda, aprobado en la reunión semanal del gabinete, es hasta la fecha el último intento del gobierno socialista por recuperar la debilitada economía española.Después de una década de prolongado crecimiento, España está oficialmente recesión, principalmente por el colapso del sector inmobiliario, y es el país de la Unión Europea con la tasa más alta de desempleo, el 13.9%.
