Rafael Serna convence en la Nuevo Progreso

GUADALAJARA, JALISCO (07/SEP/2015).- La carta de presentación del novillero español Rafael Serna, en su debut en el coso taurino de la Colonia Monumental, resultó en una actuación interesante, llena de buenos detalles, que acabó por convencer a la afición tapatía. El ibérico resultó como el único triunfador de la tercera novillada del serial realizado en la Nuevo Progreso, al cortar la única oreja de la tarde a su segundo novillo.

En Serna se nota un novillero con cualidades, escuela y mucho campo, a pesar de que fue ésta su tercera novillada con picadores en lo que va de su corta carrera. Con cabeza, finas maneras y un sentir especial, el español dejó muestra de alentadores detalles que calaron en la afición. Con su primer novillo, Rafael lució al abrirse de capa en verónicas bien cuajadas que pronto la afición le reconoció. Ya con muleta, logró destellar en muletazos con la diestra, pues el ejemplar pronto desarrolló sentido por el lado natural. A este primero lo despachó sin suerte con el acero.

Ya en su segundo, Serna logró fincar una faena que vino de menos a más. Ante un novillo que permitía el toreo, aunque sin mucha calidad, Rafael logró entenderlo para firmar tandas de mérito y calidad pegado a tablas. La gente estuvo con él y luego de sepultar el acero en sitio, le fue otorgada la oreja.

Buenas hechuras de este chaval, que en su poco recorrido por plazas de primera categoría, ha logrado caer de pie.

Quien abrió plaza fue el joven novillero Nicolás Gutiérrez, que pechó en su primer enemigo —el primero de la tarde— con el mejor ejemplar de la lidia. Bravo el novillo de la ganadería de Pablo Moreno que se prestó para el lucimiento, metiendo el morro, aunque acabando con la cara ligeramente arriba. Nicolás supo aprovechar el recorrido del astado, para cuajar tandas por ambas manos que el público le jaleó. De manera lastimosa falló en varias ocasiones con el acero y perdió toda oportunidad de obtener alguno de los trofeos. Con su segundo nada pudo hacer, ante un novillo que poco se prestó y que quedó a deber. Se fue en blanco, pero dejó muestra de sus avances con relación al año pasado.

El que cerró plaza fue el joven Leo Valadez, que la semana pasada dejó un grato sabor de boca en la afición tapatía, de ahí su repetición en este cartel. Leo lució con buenos detalles en su primer novillo, en el que también destacó la vara del picador David Vázquez, que luego de cuajar un puya en todo lo alto, se llevó la fuerte ovación del tendido. Valadez lució en capote y en un quite por zapopinas que prendió enseguida a la afición. Con muleta fueron sólo detalles, pues el toro, incierto en su embestida, no se prestó del todo al lucimiento. Mató de entera en sitio, con poco efecto, para después descabellar en un par de ocasiones.

En su segundo, Leo no anduvo cómodo, no se pudo confiar ni acomodar y se fue en silencio en el novillo que cerró plaza. Madera la tiene, y se ve un gran avance y técnica en este chaval que se le conoce en esta plaza Nuevo Progreso desde su inicio como becerrista. Habrá que verle con mejor ganado.

Así concluyó la tercera novillada, con detalles interesantes, donde México y España alzan la mano y dan alientos a la fiesta taurina.