En aquella ocasión, miles de personas a nivel nacional se emocionaron al ver a los tenistas Leo Lavalle, Luis Enrique Herrera, Jorge Lozano, Francisco Maciel y Fernando Pérez Pascal entregarse en la cancha por lograr el anhelado triunfo y fueron la motivación de varios para jugar este deporte. Hoy, a 19 años de aquellos días, Lozano reconoce que se cayó en un gran hoyo en el tenis mexicano, que no se supieron encausar el gusto que había por la disciplina y esto ahora se está viendo reflejado en el equipo copa Davis, pues se encuentra en la tercera división. "Era algo que a nosotros nos importaba mucho, hacíamos nuestros calendarios de acuerdo con la Copa Davis, ahora parece ser que ya es al revés; tanto Leo (Lavalle), Luis Enrique, Pancho Maciel, Fernando Pérez Pascal, nos encantaba jugar Copa Davis, todavía me tocó jugar con Raúl Ramírez y él fue nuestra inspiración en ese entonces, yo de chico lo veía jugar y me motivó a querer ser igual, jugar en esas copas donde las porras a México hacía que la piel se te pusiera chinita y era muy bonito", recordó Lozano. El tenis en México vino en picada y nada pudo salvarle de ir de descenso en descenso, a los tenistas les llegaría otro tipo de intereses. "Se empezó a profesionalizar el tenis mundial, se dotaron de mejores técnicas, se prepararon más físicamente, nutricionalmente, con psicólogo, nutriólogo, médico; y nosotros nos fuimos quedando atrás, pienso que eso fue lo que pasó y nos quedamos rezagados, ahora vemos los resultados. Son 20 años lo que tenemos de atraso". Se prefirió el confort al sacrificio A este tipo de adversidades, también se le sumó la falta de interés por querer salir adelante, puesto que el tenista mexicano dejó de tener ciertos apoyos y con ello prefirió no salir a otra parte del mundo, además de que los clubes privados apostaron por realizar distintos torneos. "Ahora ya hay más torneos en México, eso hace que el mexicano se quede, que no salga a tratar de mejorar su juego en el extranjero, además de que es más cómodo, estás en tu país, la gente de echa porras, ganas fama y ganan; eso es mejor que ir fuera de casa, a un lugar donde perderás, no llegarás a hoteles cinco estrellas, estás en una zona de confort, pero el que tiene fija su meta lo puede hacer sin importarle las adversidades". Dato A decir de Lozano, el problema del tenis mexicano no está en la formación de jugadores, sino en el paso que existe entre un tenista juvenil y su paso a profesional, por lo que ya se trabaja en tratar de apoyar más a estos tenistas.EL INFORMADOR/ RODRIGO VELÁZQUEZ
