Instructores certificados, clave para alcanzar objetivos

GUADALAJARA, JALISCO (17/MAR/2015).- Ya sea por estética, como acondicionamiento físico o por salud, acudir a un gimnasio a ejercitarse es una práctica que cada vez es más común. Sin embargo, hay aspectos importantes que se deben tomar en cuenta al momento de elegir dónde se va a entrenar, y uno de ellos es que el establecimiento cuente con instructores certificados.

En la mayoría de las ocasiones ahorrarse unos pesos por acudir a un gimnasio que no tenga personal capacitado puede significar un riesgo para la salud.

“Una persona se expone principalmente a sufrir lesiones al momento de realizar una mala técnica de entrenamiento y eso podría truncar el objetivo que tengan”, explica Claudia Castellanos, gerente de una sucursal perteneciente a una cadena de gimnasios.

“Para los gimnasios es parte de su responsabilidad brindar un servicio de calidad a nuestros socios, es por ello que los profesionales del entrenamiento deben desarrollar sus funciones dentro de los estándares que la sociedad demanda”.

Esta política de algunos centros de acondicionamiento ha favorecido a que día con día aparezcan más instructores certificados que tienen la capacidad de generar planes de trabajo adecuados a cada tipo de persona, pues, como explican los expertos, un instructor certificado hace un extenso análisis de las necesidades de cada persona y con base en ese estudio diseña un plan de trabajo que cumpla con las metas que cada usuario tiene en mente.

“El principal beneficio de trabajar con un instructor certificado es que los objetivos los vas a lograr de manera más eficaz y en un tiempo más corto”, subraya Claudia.

Pero detrás de estos objetivos hay un proceso por el que tiene que pasar un instructor, que además tiene que cumplir un perfil adecuado. Para certificarse como instructor en un gimnasio lo primordial es contar con estudios universitarios en carreras afines a la cultura física, la salud y la nutrición.

Posteriormente, aquellos que se capaciten como instructores deben de presentar una solicitud de certificación. En Jalisco, existe la Asociación de Fitness y Fisicoculturismo del Estado de Jalisco (AFFEJ), que es el organismo que otorga estas certificaciones y avala las capacidades de un instructor.

Una vez obtenida, el instructor debe demostrar día a día que está preparado para acondicionar físicamente a una persona.

SABER MÁS
Capacidades en las que se puede certificar un instructor

Instructor personalizado.

Coach de vida (asesoría nutricional, acondicionamiento físico).

Clases fitness (crossfit, pilates, aerobics, spinning, entre otros).

Entrenamiento funcional.

Nutrición.

Psicología deportiva.

Satisfacción física y mental, lo que motiva a ir a un gimnasio

Juan Pablo León, joven de 25 años, ha sido usuario continuo de los gimnasios. Dice que en el tiempo que tiene acudiendo a este tipo de lugares siempre se ha preocupado por trabajar con instructores certificados.

“Decidí entrar primero que nada para aumentar mi condición física, para sentirme mejor mental y físicamente, ya que el gimnasio me distrae de mis actividades cotidianas, creo que es una forma de quererte a ti mismo y darle al cuerpo lo que necesita”, comenta.

También resalta las bondades de trabajar con un instructor certificado: “Para mí realmente es muy importante, debido a que por lo general saben más de rutinas y de dietas para lograr buenos resultados en un corto tiempo”.

LA VOZ DEL EXPERTO
Es un factor crucial

FRANCISCO GONZÁLEZ VILLALOBOS (coordinador de la Licenciatura en Cultura Física y Deporte de la UdeG)

Para Francisco González Villalobos, coordinador de la Licenciatura en Cultura Física y Deporte de la Universidad de Guadalajara, trabajar con un instructor certificado es crucial, “porque es de suponer que alguien certificado ha tenido la capacidad de demostrar sus conocimientos de todo lo que implica sugerirle a una persona el trabajo de las diferentes actividades de lo que se puede hacer en un gimnasio. Debe tener conocimientos teóricos, metodológicos y prácticos del tipo de actividades que él va a promover y de los resultados que espera de las personas con las cuales trabaja”.

Además, señala que un instructor certificado tiene la capacidad de diseñar, implementar y evaluar programas de acondicionamiento físico para diferentes necesidades y tipos de personas.

Sin embargo, advierte que existe personal que es certificado mediante cursos muy cortos.

“Esto conlleva a que el usuario se exponga a varios riesgos. Primero a que no se cumplan sus expectativas; también se expone a que en el peor de los caso sufra un daño físico en una estructura corporal que no sea bien trabajada”.

También destaca la importancia de que el instructor tenga un título profesional.

TESTIMONIO
Pasión por el trabajo

Óscar Martínez es un joven egresado de la Licenciatura en Cultura Física y Deporte. Es instructor certificado ante la Asociación de Fitness y Fisicoculturismo del Estado de Jalisco y disfruta día a día de su profesión, a la cual no ve como un trabajo, sino como un instrumento para generar satisfacciones en las personas.

“Lo que a mí me gusta trabajar con las personas es que cambien su estilo de vida, que sean más saludables, que se sientan bien, completas con lo que hacen”, comenta Óscar.

Óscar explica cuál es el proceso que él, como instructor certificado en un gimnasio, sigue con sus alumnos: “Primero se les hace una evaluación física para ver qué ha hecho en su vida deportiva y después hacerle un historial médico. Posteriormente, agendamos una cita para la rutina, la cual se diseña de acuerdo a la evaluación física. Cada rutina va por objetivos, de acuerdo a los que tenga cada persona, mi labor va en función a lo que necesita cada persona, es personalizada”.

También, resalta la importancia que tiene el hecho de que la gente que acude a su gimnasio se informe del historial del instructor, pues así pueden avalar su trabajo y generar un ambiente de confianza que le permita conseguir los objetivos trazados.

De igual forma, advierte sobre los riesgos de no entrenarse con un instructor certificado, algo que él vivió en carne propia a los 16 años.

Por último, Óscar habla de cómo cada día son más los instructores certificados: “Poco a poco la gente se está interesando más por certificarse, lo positivo es que el mundo del fitness va creciendo y se llegará al punto en el que van a haber más instructores certificados para trabajar bien con la gente”.