* Morralla

Los resultados del día dentro de la Copa Confederaciones -- especie de Premundial sudafricano--, eclipsaron, en cuestión de horas, los débiles ecos del tianguis de piernas celebrado el miércoles en Cancún.

Mientras el triunfo (3-0) de Brasil sobre Estados Unidos salía por los fueros de la lógica -- Estados Unidos ha crecido, sí..., pero para alternar con los gigantes del "soccer" aún le falta --, la derrota de Italia (1-0), con todo y sus indiscutibles diplomas de campeón mundial, ante Egipto, reivindica el legítimo derecho de los patos a tirarle a las escopetas... si éstas se descuidan.

"El episodio puede ser ilustrativo, si se recuerda que México funda sus esperanzas de sacar boleto para el Mundial, en la convicción de que el Estadio Azteca será un bastión inexpugnable para los rivales que lo visitarán en los próximos meses. Y con las recientes experiencias de Argentina en la eliminatoria sudamericana, y ahora de Italia en a Confederaciones, valdría más que Javier Aguirre y sus filibusteros adquirieran la costumbre de dormir, en lo sucesivo, con un ojo abierto".
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El "draft" de Cancún generó una serie de titulares y comentarios periodísticos a todas luces despectivos. "Chatarra", "Morralla", "Pitarrilla", fueron algunos de los vocablos utilizados para calificar, en lo general, las transferencias que se completaron. Y es que, salvo  el traspaso de Chuy Corona, de los "Tecos" al Cruz Azul -- y con el mundo del futbol deslumbrado aún por los espectaculares golpes de chequera que dió el Real Madrid para contratar a Kaká y Cristiano Ronaldo --, del resto, aquí, nada ocurrió que implique la promesa de que algún equipo vaya a tener una metamorfosis espectacular en la próxima temporada.
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De los equipos locales --, para no hablar del América y de otros que estarían obligados a realizar contrataciones espectaculares para alzar el vuelo, tras sus mediocres desempeños en campañas recientes --,el Atlas se significó por la cantidad de "refuerzos" a su plantel; el Guadalajara, por haber regresado con las manos vacías.

Falta ver --, ya lo dirá el tiempo -- si los rojinegros incorporaron calidad y no sólo cartuchos a su elenco, y si las "Chivas", al margen de que no adquirieron a la figura mediática que falta en sus filas, encuentran sobre la marcha a las piezas que le den el toque de calidad -- y de competitividad, por tanto -- que también faltan en el equipo.