Deportes | A propósito, por Jaime García Elías * Debut soñado A propósito, por Jaime García Elías Por: EL INFORMADOR 19 de abril de 2009 - 21:37 hs Paco Ramírez tuvo el debut soñado: se presentó como timonel del Guadalajara en el “Clásico” ante el América, y condujo a su equipo, por el buen planteamiento y el adecuado manejo del partido, a una victoria que lo deja perfilado hacia la clasificación para la “liguilla”. Conclusión: el flamante timonel rojiblanco había llegado a este compromiso en calidad de “villano”, por las circunstancias absolutamente anómalas --el intempestivo cese de Omar Arellano padre como técnico, principalmente-- que se resolvieron con su designación... y salió del estadio en calidad de héroe. * Dos circunstancias favorecieron ese corolario: por una parte, que la victoria, como el sacramento del bautismo, borra todos los pecados; por la otra, que la memoria de los aficionados es flaca. Exitistas como son --como la inmensa mayoría de los fanáticos, por lo demás--, los simpatizantes del “Rebaño Sagrado”, que lo habían abucheado la noche del empate ante el Lanús e incluso la tarde de la victoria sobre el San Luis, ayer salieron del que fue, casi seguramente, el último “Clásico” disputado en el Jalisco, plenamente reconciliados con su equipo. * Hay que subrayar el apropiado planteamiento y el criterioso manejo del partido... La reaparición de Galindo en el centro de la zaga y el trabajo realizado en el medio campo por Pineda, Solís y Báez, dieron orden y solidez a la defensiva. De hecho, las oportunidades que tuvieron Arellano --dos veces-- y Medina, en el primer tiempo, fueron mucho más nítidas que las de Reyna y De Pinho por parte del América. En el segundo, los cambios (Fabián por Báez y el “Chicharito” por Morales) se hicieron oportunamente. En ambos fue evidente el afán de acrecentar el dominio... El gol llegó por la habilidad --y la intención, sobre todo-- de Medina, y el oportunismo de Ponce para llegar totalmente desmarcado a la zona de remate. El resto consistió en cubrir los espacios y administrar sabiamente la pelota. Eso frustró las intentonas de un rival que confirmó la malévola definición de que es “Cabañas... y diez más”. Sin su ariete paraguayo, ese equipo no pasa de ser un grupo de náufragos en medio de una tempestad en alta mar. * El Atlas, mientras tanto, calamitoso a la defensiva, aprendía en Torreón que “el que a hierro mata --por el marcador de su reciente triunfo sobre el Necaxa--... a hierro muere”. Temas A propósito Jaime García Elías Lee También Naasón, Covarrubias, Omar… Harfuch y los medios Gobierno federal refuerza combate a extorsión y desapariciones Sociales: André e Isabella reciben la Primera Comunión en familia Recibe las últimas noticias en tu e-mail Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones