Yánderi Yazaret Pech Arellano tenía un embarazo gemelar. A la semana 23, en un parto espontáneo, perdió a una niña; especialistas del Instituto Mexicano del Seguro Social en Yucatán lograron que el otro gemelo permaneciera en el vientre de la madre 14 días más y naciera a la semana 25 con un peso de 825 gramos.Es la primera vez en el estado en que médicos del Seguro Social logran que un bebé prematuro extremo permanezca vivo dentro de la madre. El bebé, de 25 semanas de gestación y 820 gramos de peso, nació por parto vaginal en mayo y gracias a cuidados pediátricos pudo sobrevivir y fue dado de alta.Israel Jurado Vargas, coordinador clínico de la División de Ginecología y Obstetricia del Hospital General Regional Número 1 de Mérida, dijo que en los más de 50 años del hospital no se había registrado un caso similar.La paciente llegó por casualidad, puesto que es de Campeche; estaba de visita, se presentó la urgencia y se quedó en la clínica desde el inicio. El 18 de mayo, ella comenzó con algunas complicaciones que adelantaron el parto. En ese momento cursaba con embarazo gemelar de 23 semanas de gestación."Gracias a Dios llegamos a este hospital; lamentablemente fue por una emergencia: uno de los dos bebés estaba naciendo, pero no sobrevivió", explicó. En casos como éste, informó el coordinador clínico, en los que se presenta un embarazo gemelar y comienza la labor de parto en edad gestacional prematura, se atiende el alumbramiento de ambos bebés; sin embargo, hubo síntomas que cambiaron el manejo de la paciente."Comenzó con el trabajo de parto, expulsó al primer bebé y posteriormente debía iniciar el proceso de expulsión para el siguiente; llamó la atención porque no avanzaba, no salió la placenta del primer producto y a través de atención y monitoreo especializado detectamos que el feto se encontraba en perfectas condiciones; había latido afortunadamente", comentó el titular de la Coordinación Clínica de la División de Ginecología y Obstetricia.Fue así como el equipo de especialistas logró preservar el embarazo del segundo bebé por 14 días más, decisión que devolvió la esperanza a la señora Pech Arellano. "Mi bebé se aferró a la vida. Los médicos decidieron hacer estudios, la situación estaba óptima para poder conservarlo; fueron 14 días en los que él estuvo en mi vientre", expresó.JM
