Después de una primera evaluación de los daños que dejó la inundación del domingo en la zona de Santa Anita, en Tlajomulco de Zúñiga, y de un cálculo de las obras requeridas para mitigar futuros eventos del tipo, el Ayuntamiento estimó que se necesitan alrededor de 50 millones de pesos (MDP), afirmó el alcalde Salvador Zamora.“Tenemos que hacer obras de mitigación en zonas altas, reforzar vasos reguladores, hacer nuevos, renovar todos los cauces, insistir en hacer más gaviones para tener obras de contención, más cárcamos que nos permitan guardar agua y reencauzarla paulatinamente”.Se buscarán dichos recursos de los fondos de desastres estatal y federal. Ayer se instaló el Comité de Emergencias que, además, hizo la declaratoria de emergencia, por lo que ya se redactan las peticiones formales.La tormenta en Santa Anita provocó que los arroyos que cruzan la zona y bajan desde La Primavera, como La Culebra y La Colorada, se desbordaran. Esto colapsó las bardas perimetrales de fraccionamientos como La Arbolada y el club de golf Santa Anita, y levantó el asfalto en tres puntos de Boulevard Santa Anita, por lo que se volvió intransitable.La avenida López Mateos y el Camino Real a Colima también resultaron con afectaciones. El municipio confirmó que “no hubo pérdidas humanas ni (personas) lesionadas”.Las autoridades trabajaron con maquinaria en el desazolve de los arroyos. Zamora indicó que, de los 12 gaviones de La Colorada, uno de ellos se dañó. También hubo vasos reguladores que llegaron al límite de su capacidad y otros la superaron.Para mitigar las inundaciones se requiere además construir un colector de aguas pluviales que costaría 20 millones de pesos. “Nosotros queremos que arranque lo antes posible”.Hoy por la tarde se hará otro recorrido, esta vez con autoridades estatales, para precisar si hay más que se puedan ejecutar (lo que elevaría la cifra de 50 millones de pesos). Aclaró que son “prioritarios” los trabajos de mitigación, pues de nada servirá rehabilitar los caminos dañados si no se evita que el agua vuelva a levantar el pavimento. Ya se había calmado la tormenta del domingo en Santa Anita cuando José Gutiérrez salió de su casa, en el fraccionamiento La Arbolada. Esperaba que le abrieran la pluma, pero el agua del canal que corre en paralelo al muro perimetral derribó una parte de éste. “Se vino la creciente y entonces hablo a mi casa”.Alertó a su mujer, Alejandra Elizondo, quien estaba afuera del domicilio. Había salido con sus hijos a ver qué ocurría en el ingreso y se le ocurrió voltear hacia la barda que estaba frente a su propiedad. Así vio que de allí salían chorritos de agua que se elevaban cada vez más.“Se veían olas. En ese momento los niños me dicen: ‘¡Mamá, graba!’, y les digo ‘¡No, métanse!’. Cuando nos damos la vuelta se truenan las bardas. Esa era mi voz de terror”.Alejandra y sus hijos corrieron hacia el interior antes de que el agua, lodo, escombros y ramas los embistieran. Una vez adentro les dijo a sus hijos que subieran a la planta alta, pues no sabía la magnitud del fenómeno.Su marido regresó a la casa tras conducir 200 metros a contracorriente. Desde su ventana, Alejandra grabó un video en donde se ve al afluente arrastrar los coches de sus vecinos. Fue su videoclip el que se viralizó el domingo por la tarde.Ella presume que su auto se salvó gracias a que un trozo de barda que quedó frente a su hogar desvió la corriente. Esperaron a que la inundación bajara y decenas de vecinos de cuadras aledañas salieron, armados con palas, a ayudarlos con la limpieza.Gloria, otra afectada, agradeció el gesto. “Toda la cuadra fue solidaria. Niños, niñas, estoy muy emocionada del apoyo. Protección Civil y toda la ‘banda’ del Ayuntamiento llegaron en sus carrazos horas después, pero ya estaba muy limpio todo”.Alejandra cree que la dimensión del desastre derivó de los nuevos fraccionamientos, los que están más cerca del bosque La Primavera, pues para cada uno construyen nuevos canales y todos van a dar al que pasa junto a La Arbolada. Espera que las autoridades remedien la situación e incluso refuercen el muro para evitar lo que podría convertirse en tragedia.Como las inundaciones en la zona Sur de la metrópoli han aumentado debido a la construcción de nuevos desarrollos que se internan cada vez más hacia el bosque La Primavera, el alcalde de Tlajomulco, Salvador Zamora, informó que no se descarta revisar si entre los fraccionamientos que actualmente se construyen hubo alguna irregularidad.Afirmó que, de hallar alguna inconsistencia, su administración actuará conforme a derecho para sancionar a los responsables.El edil insistió en que durante su Gobierno no se ha autorizado un solo proyecto habitacional nuevo. “Si alguno está en desarrollo fue en otras administraciones. Se mantiene la veda de construcción de viviendas en esta administración”.Lamentó la magnitud del suceso, pues es muestra de los eventos que pueden ocurrir por el desarrollo urbano. “Nosotros advertimos la fragilidad que tenía este suelo del bosque La Primavera”, dijo.Salvador Zamora informó que ya cuentan con el menaje que se entregará a los habitantes de las colonias El Terrón, Lagunita y Ciénega, quienes resultaron afectados por las tormentas de los pasados 26 y 30 de junio.El evento ocurrirá hoy a las 19:00 horas, y 50 familias que fueron afectadas en El Terrón serán las primeras beneficiadas. Los electrodomésticos, muebles y colchones serán de acuerdo al censo de daños que se levantó tras las contingencias.El menaje ascendió a un millón de pesos, y ocho de 10 pesos se obtuvieron del Fondo Estatal de Desastres Naturales; el resto fue participación municipal.
