Viernes, 19 de Abril 2024

Llevaba meses el hedor en pozo con cadáveres

Recuperan otras 30 bolsas, con las que ya suman 105 con restos humanos en el interior

Por: El Informador

Elementos de la Guardia Nacional resguardan el terreno de la colonia La Primavera. EL INFORMADOR/Archivo

Elementos de la Guardia Nacional resguardan el terreno de la colonia La Primavera. EL INFORMADOR/Archivo

A una semana del inicio de la extracción de bolsas con restos humanos en un pozo en la colonia La Primavera, en Zapopan, ayer se sumaron otras 30, con lo que ya van 105 paquetes, informó la Fiscalía del Estado.

Hoy continúan los trabajos “y van para largo”, escuchó comentar una vecina del lugar a los oficiales que vigilan el área. Varios pobladores entrevistados confesaron que desde hace meses olían la fetidez del pozo, pero no sospechaban que fueran restos humanos.

El hoyo está dentro de una propiedad al fondo de la calle Durazno, la cual cruzaban los lugareños con frecuencia e incluso llevaban a pastar animales. Aunque la puerta está cerrada, alguien abrió un boquete en la barda por donde cabía un caballo o una vaca, pero con el tiempo lo ensancharon más para que cupiera una camioneta.

Desde hace unos meses, los habitantes comenzaron a percibir malos olores, justo desde que las lluvias iniciaron, dijeron un trabajador y su patrón, quienes prefirieron reservar sus nombres.

“Cada que pasábamos por ahí se veían nubes de moscas y, pues se nos hizo raro, yo pensé que se había caído una vaca”, contó el empleado.

Su patrón recordó que esa propiedad pertenecía a un particular que hace alrededor de 10 años levantó el muro de adobe perimetral, excavó el pozo y dejó a medio construir unas caballerizas. Sin embargo, abandonó la obra.

Un compañero de él, quien vive cerca del lugar, se acercó para explicar que el dueño ya murió, por lo que el hijo regresó hace unos días y fue éste quien reportó.

Los múltiples hallazgos hicieron que el patrón recordara lo contado por un amigo suyo, un campesino que llevó a pastar a sus tres vacas. Hace un mes, como a las ocho de la mañana, vio a un joven que caminaba delante de él con una bolsa negra a cuestas y que se metió por el boquete.

Cuando el campesino llegó a ese punto vio que el joven regresaba ya sin nada; solo le llamó la atención y contó la anécdota. “No supo qué cargaba ni dónde la dejó”.

El compañero del patrón aseguró que el pozo estaba tapado con una rueda de concreto, pero que un muchacho la robó para venderla; desde entonces, quedó abierto.

Datos sobre los cuerpos, en espera

Sobre la identidad de los cadáveres, las autoridades refirieron que se desconoce incluso el sexo de las víctimas, la causa del deceso o el grado de descomposición, por lo que los datos sobre los cuerpos se conocerán cuando el Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses trabaje en ello.

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